Siguen las reacciones luego de que anoche
Carabineros detuviera a 29 personas que participaban de una fiesta clandestina en un recinto que habitualmente funciona como estacionamiento y lavado de autos en la comuna de Santiago.
El
Gobierno anunció una querella en contra del organizador, de nacionalidad peruana, y que estudiará si amerita la expulsión de los otros extranjeros que fueron apresados.
Gonzalo Blumel, ministro del Interior, mostró su repudio a través de un mensaje en redes sociales.
"Inconcebible que algunos insistan en poner en riesgo vidas con este tipo de conductas, mientras todo el país lucha contra la pandemia", comenzó.
Sumándose a lo anunciado anteriormente por el subsecretario Juan Francisco Galli, apuntó que "hay 29 personas detenidas.
Ejerceremos acciones legales para que asuman las consecuencias de sus irresponsables actos".También mostraron su rechazo el
intendente de la Región Metropolitana, Felipe Guevara, y el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri."Organizar fiesta no es solo una irresponsabilidad, sino que
una estupidez... Tenemos una cifra cuantiosa de detenidos por esta irresponsabilidad de personas que
se creen inmunes, superhéroes, inmortales, no se dan cuenta que hoy esta muriendo una persona cada 33 minutos por el virus en Chile y sabemos que el virus se contagia por contacto", señaló la máxima autoridad regional.
Guevara agregó que "se han realizado los sumarios sanitarios. Recordar que en la última fiesta que se organizó en Maipú terminó con una multa de 50 millones de pesos para el organizador y en un proceso penal que puede terminar con 541 días efectivos de cárcel. Es lo que va a ocurrir aquí".
Mientras que
Alessandri avisó que "nos vamos a dejar caer con todo el peso de la ley, ojalá que el fiscal lo deje con prisión preventiva al organizador. Realmente, después de todo lo que hemos vivido, que hayan irresponsables que hagan fiestas, me irrita y los vamos a perseguir con todo el peso de la ley. Ojalá que haya un repudio social".