La ministra de la Corte Suprema, María Teresa Letelier, habló hoy en un punto de prensa sobre la investigación que lleva adelante el Comité de Ética del máximo tribunal por presunto tráfico de influencias en el nombramiento de jueces, que la incluye a ella y a Mario Carroza, Ángela Vivanco y Jean Pierre Matus.
Consultada por las irregularidades que se indagan, Letelier respondió que "ayer fuimos notificados de que estaba constituida la comisión de ética y la verdad es que yo no tengo nada que decir, estoy a disposición de la comisión y de la Corte, por supuesto. El que nadie hace nada teme".
"Yo aparezco, al parecer, en una conversación de un colega que es un tercero, no soy yo quien conversa eso. Quiero que quede muy claro, no soy yo quien está hablando con el señor
Mario Desbordes, sino que un colega a quien conozco, como conozco a miles de personas en el Poder Judicial". agregó la ministra del máximo tribunal.
"Y él le pide ayuda, al parecer, para mi nombramiento. Si el señor Desbordes hizo algo o no hizo algo para mi nombramiento, no lo sé", indicó.
Con relación a la solicitud de inhabilidad por parte del ministro Jean Pierre Matus, Letelier aclaró que "la situación es diferente a la mía. O sea, el ministro Matus ha señalado que presentó la incompetencia del tribunal, de la comisión de Ética, porque él no era ministro de la Corte Suprema".
"El ministro Matus es uno de los ministros externos, entonces él señala eso. Ahora, es la comisión (de Ética) la que tiene que resolver, que es una comisión que está actuando reservadamente. Tenemos que esperar solamente", sostuvo la ministra.
En cuanto a los nombramientos y si es habitual el lobby para conseguirlos, María Teresa Letelier indicó que "es un nombramiento que al final es político, estamos en un poder del Estado donde los poderes se tienen que poder de acuerdo".
"El Senado tiene que votar y si el Senado no se pone de acuerdo para votar, nos encontramos en la situación que tenemos que no se nombren a los ministros", explicó la ministra.
Al finalizar, María Teresa Letelier descartó que, producto de la investigación, exista un clima de tensión en la Corte Suprema. "Por supuesto que tenemos diferencias, pero de tensión no. Somos personas adultas y estamos en la cúpula de un poder de Estado, no podemos estar peleando. Simplemente hay diferencias".
