El debate por los resultados de la estrategia del Gobierno para enfrentar la crisis de seguridad en el país está instalado con fuerza entre las autoridades. La repetida frase de "
basta de diagnósticos", mutó esta semana a "
estamos cansados de las reuniones", en voz de la timonel PS, Paulina Vodanovic, lo que terminó incomodando al Ejecutivo.
Y es que en medio de varios fines de semana largos marcados por un alto número de homicidios, y en un contexto atravesado por la carrera municipal -centrada, precisamente, en la seguridad-, las críticas son transversales; la oposición mantiene su frente abierto, pero también se ha activado el "fuego amigo".
"Tendrían que preguntarle a ella", fue la frase que repitió varias veces ayer la ministra Vocera de Gobierno, Camila Vallejo, ante sus dos férreas defensas hacia las críticas de la senadora Vodanovi. La secretaria de Estado enfatizó que el Presidente Gabriel Boric sí ha liderado una estrategia en seguridad -a través del Ministerio del Interior-, y que el Plan Calles sin Violencia sí ha dado resultados, y que "no hay solo una medida" que garantice "de la noche a la mañana" terminar con los homicidios, sino que el conjunto de ellas.
"El plan Calles sin Violencia, como operativo preventivo policial, con cuadrillas enjambre, sí ha tenido resultado en materia de detención, en poder identificar personas con controles pendientes, hay 200 personas que han sido detenidas en las últimas semanas, hay fiscalizaciones, un conjunto de medidas que están funcionado", dijo el martes Vallejo a 24 Horas.
No obstante, reconoció que "en materia de homicidios, el asunto es mucho más complejo, eso ha requerido que se esté trabajando en el fortalecimiento de los equipos ECOH, especializados en el crimen organizado y homicidios, para poder comenzar a desplegarlos, particularmente en la RM".
La ministra del Interior, Carolina Tohá, dijo ayer a Radio Pauta que con el Plan Calles sin Violencia "se logró bajar los homicidios el año pasado, después de ocho años que venían subiendo. El problema, es que lo que sirve para frenar una curva y hacerla retroceder, no necesariamente sirve para todas las situaciones, por eso el plan ha ido teniendo una evolución en sus estrategias".
El Plan Calles sin Violencia fue anunciado en abril de 2023 por el Gobierno, tras la muerte del carabinero Daniel Palma, aunque desde el Ejecutivo afirmaron que se venía trabajado desde enero de ese año. En concreto, los ejes clave eran el de persecución penal y aumento de patrullajes y presencia policial.
En julio, la ministra Tohá adelantó que el Plan se extendería a toda la RM, no obstante, alcaldes de comunas como Lampa y Quilicura, donde se han registrado violentos crímenes, han cuestionado que no forman parte de esta iniciativa.
"Es un fracaso" y "reevaluarlo o terminarlo"
Pese a los argumentos que han entregado las autoridades, el Plan Calles sin Violencia sigue en tela de juicio, con la misma intensidad en que ha sido cuestionado otras veces a raíz de anteriores eventos delictuales. La iniciativa "clave" del Gobierno, a varios no convence.
El martes, en conversación con EmolTV, el
senador Iván Flores (DC), respaldó la percepción de Vodanovic en materia de las acciones en seguridad. "No solamente el fuego amigo a veces viene de afuera, a veces viene del Gobierno a otros poderes el estado, la senadora Vodanovic apuntó a una realidad que no es posible disimular", comentó.
En tanto, la senadora por Antofagasta, Paulina Núñez (RN), dijo sobre el Plan Calles sin Violencia que "no es suficiente para enfrentar al crimen organizado. Es necesario reevaluarlo o, en su defecto, terminarlo, porque debemos ser eficientes con los recursos del Estado y tomar acciones concretas para enfrentar la creciente ola de violencia que afecta al país y en particular a la región de Antofagasta".
Por su parte, el diputado de Amarillos, Andrés Jouannet, planteó que dicho plan "es un fracaso, ha fracasado realmente, muere todos los días la gente y la verdad es que, si es sin violencia, la gente podría andar en las calles".
Además, adelantó que "en dos semanas vamos a presentar un proyecto para tener una policía de élite. En eso Paulina Vodanovic también está, está el senador Quintana, lo he conversado con ellos, también parlamentarios de derecha”.
Expertos valoran presencia policial, pero proponen mejoras
En conversación con Emol, expertos en seguridad toman una postura de mayor cautela: si bien coinciden en que se deben mejorar aspectos del mismo, aunque no ponerle fin. Eso sí, apuntan a que hay otros elementos estructurales que se deben atender en el combate al crimen organizado.
Para el doctor en criminología, Mauricio Valdivia, es "fundamental que haya presencia policial" en las calles, sin embargo, comenta que el control policial "no aborda el fondo del problema, porque en Chile tenemos una crisis estructural, que ha pasado por varios gobiernos, y tiene que ver con la crisis penitenciaria".
"Tenemos casi 5 mil personas más de lo que el sistema aguanta, y no hay segregación, no hay inclusión, y por lo tanto, las cárceles se están convirtiendo en lo que siempre hemos temido: en el lugar donde se organiza el crimen. La reincidencia en nuestro país es de las más altas del mundo, con el 70%", acotó.
"Yo diría como balance que necesitamos que el plan se refuerce no solo en la RM sino que también en regiones, pero seguir adelante y reforzarlo en término de otros componentes, tecnológicos, coordinación con otras institituciones y darle un rol a la seguridad privada, a propósito del asalto a Brinks".
Jorge Araya, experto en seguridad Usach
Jorge Araya, experto en seguridad de la Usach, comenta que el Plan Calles sin Violencia no "tiene mucha novedad", en el sentido de que se centra en las tareas básicas o clásicas de los cuerpos policiales. "Sin embargo, hacía falta una activación de Carabineros con mayor presencia en las calles, yo creo que desde ahí el plan ha aportado, en la medida que focalizó una cantidad de comunas, con mayor fiscalizaciones, órdenes de detención pendientes y desbaratar a bandas".
El experto dice que una falencia puede ser que al no ser consideradas algunas comunas, "van a empezar a ser víctimas de estos hechos, y los delincuentes van a llegar a otros sectores de la RM u otras regiones". Esto, dice, porque "ciudades intermedias han tomado protagonismo, puede ser estrategia de las bandas criminales, donde quizás pueden pasar más inadvertidos; hemos visto decomisos de droga en Tocopilla o el secuestro al empresario en Rancagua", cerró.
"Yo diría como balance que necesitamos que el plan se refuerce no solo en la RM sino que también en regiones, pero seguir adelante y reforzarlo en término de otros componentes, tecnológicos, coordinación con otras institituciones y darle un rol a la seguridad privada, a propósito del asalto a Brinks", cerró.
Por su parte, Rocío Zepeda, experta en seguridad de la U. Mayor, dice que es necesario esperar que se conozcan más indicadores para pensar en modificar el plan.
"Lo que se puede ver en primera instancia es el despliegue policial en la Región Metropolitana efectivamente ha aumentado, y eso es algo que se ha hecho visible. Pero para poder sacar un diagnóstico o para poder ver opciones de mejora o para poder decidir terminar con el plan de seguridad, tienen que salir las cifras primero. Es demasiado apresurado llamar a terminar la obra o llamar a introducir a nueva fuerza o nuevos elementos coercitivos dentro de las acciones que se están planeando", expresó.