El cambio de cautelar del exalcalde de Recoleta, Daniel Jadue -de prisión preventiva a arresto domiciliario total y arraigo-, abrió un flaco con uno de sus antiguos socios de los primeros pasos de la Asociación Chilena de Farmacias Populares (Achifarp), la misma por el que el militante PC fue imputado por administración desleal, estafa, cohecho, delito concursal y fraude al fisco.
El martes, el abogado de Jadue, Juan Carlos Manríquez, quien resaltó que la incorporación de nuevas pruebas habían permitido calibrar las medidas cautelares de su defendido. Asimismo, dijo a Radio Universo, que respecto a los delitos de administración desleal, había una gran cantidad de información que había que tratar y reconstruir. En ese proceso, apuntó al alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, quien fue tesorero de la Achifarp.
"Así descubrimos declaraciones nuevas que dejaban establecido que el tesorero de Achifarp, a quien le correspondía llevar adelante el control, no lo ejerció nunca, que es el alcalde Sharp. Que se retiró, dejó de pagar las cuotas, y que entre esas cuotas, y la acreencia de BestQuality, que es la supuesta estafa, se reconstruyó el 84% del déficit de Achifarp, que generó entonces la insolvencia, que uno podría decir que fue hasta ficticia bajo estos elementos", afirmó.
Manríquez, junto con señalar que como defensa estaban dispuestos a exponer las pruebas "donde sea", detalló que de acuerdo a las actas de Achifarp, Jadue no tenía facultades de administración, sino que para "facilitar la gestión de Achifarp", mientras que "de acuerdo al artículo 26, las facultades de control sobre las cuentas corrientes, los cheques, es del tesorero, y conforme a los estatutos, el tesorero era el señor Sharp". Además, mencionó que existe la versión de un testigo que apunta a una negligencia grave del tesorero, que habría afectado la gestión de Achifarp.
Con todo, afirmó que con el avance de la causa, revisará si es necesario o resulta útil, "no se descarta ninguna diligencia", lo que podría incorporar que Sharp declare en el caso.
Respuesta y declaración de Sharp
En respuesta, Sharp subrayó el martes que "hace más de un año declaré en el caso por el cual Daniel Jadue y otras personas fueron formalizadas. Entendemos que la fiscal ponderó esa y otras declaraciones para seguir la investigación de la cual somos muy respetuosos. No logramos entender de qué forma posibles delitos que son asociados a conductas cometidas en Recoleta pueden llegar a tener relación con Valparaíso".
Con todo, aseguró que están interesados en que la investigación siga su curso y se resuelva según los antecedentes que se aportaron en el marco del juicio, "
para el cual hemos colaborado y lo seguiremos haciendo".
A fines de mayo, durante la formalización del hasta entonces alcalde de Recoleta, la fiscal Giovanna Herrera, de la Fiscalía Regional Centro Norte, expuso las declaraciones de exmiembros de Achifarp, entre ellos, la del alcalde Jorge Sharp.
En concreto, el alcalde declaró ante la persecutora en julio de 2023, en calidad de testigo, instancia en la que señaló: "en mi calidad de tesorero, yo no tenía acceso a las cuentas bancarias (...). El que contrataba a los asesores y secretarios ejecutivos era, tengo entendido, el alcalde Jadue", había señalado el jefe comunal de Valparaíso.
La trama de Achifarp y el rol de Sharp
Era mayo de 2016 cuando se anunció públicamente la creación de la Asociación Chilena de Farmacias Populares, donde participaron 80 municipios del país y Daniel Jadue se convirtió en su presidente.
El directorio inicial, además de Jadue, quedó conformado de esta manera: la alcaldesa de San Bernardo, Nora Cuevas era la vicepresidenta; el alcalde de Puente Alto, Germán Codina era el segundo vicepresidente; el jefe comunal de Huechuraba, Carlos Cuadrado oficiaba como secretario general; el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp era tesorero; el acalde de Rauco, Enrique Olivares fue director general; el alcalde de Coyhaique, Alejandro Huala era su director. En tanto, el secretario ejecutivo era Daniel Moraga.
La salida de Sharp de la Achifarp se concretó en septiembre de 2021, a raíz de "diferencias" sobre cómo se estaban realizando las cosas al interior de la Achifarp. Por ese entonces, la asociación ya había sufrido migraciones de los alcaldes de Puente Alto, Concepción y Arica, entre otros, y en 2020, con la pandemia, se abrió la polémica por la adquisición de Avifavir, un medicamento de origen ruso para el presunto tratamiento contra el covid-19, un año más tarde, la Contraloría ofició a la asociación para entregar antecedentes relativo a la compra del mismo.
También estuvo en la mira la compra de Interferón a la Universidad de Concepción, que estaba en etapa experimental, no aprobado aún para su administración.
En conversación con CNN Chile, a mediados de agosto, el alcalde de Valparaíso precisó que su salida se debió a "la manera en que se desarrolló la administración" de la asociación.
En ese sentido, detalló que "particularmente, en los últimos años -2020 y 2021- no se realizaban reuniones de directorio ni se desarrollaba un funcionamiento que, a mi juicio, debía tener esta asociación. Cuestiones que, a mi juicio, no justificaban que no siguiera siendo tesorero".
Asimismo, aseguró que en la práctica, y tal como le había comentado en julio de 2023 a la fiscal en su declaración, "nunca ejercí con el cargo de tesorero".
Otra de las razones por las que Sharp habría decidido salir de la asociación apuntaba a que, a su juicio, el sistema de decisiones recaía o se concentraba "en el presidente de la Achifarp, tal cual hay documentos que señalan aquello".
Declaración del testigo
Fue el 13 de agosto cuando se conoció la declaración del testigo mencionado por el alcalde de Jadue para apuntar contra una eventual responsabilidad en el comportamiento de Sharp como tesorero. Se trata de Marco Fernández, exdirector de la Farmacia Popular de Valparaíso.
En su declaración, Fernández sostuvo que tras crear la primera farmacia popular en la Municipalidad de Recoleta, donde trabajaba, "aproximadamente en noviembre de 2016 sostuve una reunión con el recién electo alcalde Jorge Sharp, donde me invita a participar de su administración, integrándome en diciembre del 2016 en el cargo de subdirección de Economía en Salud, dependiente de la Dirección de Salud Comunal".
"Sabiendo el estado de la administración del dinero público en la Achifarp, (...) le sugiero al alcalde Sharp evaluar la continuidad de la Municipalidad de Valparaíso en la Achifarp. Es así como el alcalde Sharp dio la instrucción de que la Municipalidad de Valparaíso dejara de pagar la cuota, por desconfianza sobre el correcto uso de los recursos, los cuales debían ser resguardados y supervigilados de manera obligatoria por el tesorero Sharp, o sea, el alcalde deja de pagar la cuota por desconfianza sobre la administración de los recursos por parte del tesorero Sharp", hace notar Fernández.
"Mi sorpresa fue que ni así cumplió con sus responsabilidades legales. En este momento ya se configura el delito de omisión de denuncia por parte del alcalde tesorero, ya que cuenta con los antecedentes para dejar de pagar y no realiza ninguna denuncia ni solicita auditoría, ni siquiera pide los balances", aseveró.
Añade que "aún siendo tesorero, Sharp me da la instrucción de comenzar a crear una nueva institución, con el objetivo de agrupar a las municipalidades que se hayan ido de la Achifarp. A mí me pareció una deslealtad crear una institución paralela aún siendo de la directiva de la institución que quiere perjudicar, por lo que insistí en que renuncie al cargo de tesorero y se realice la denuncia formal de la Municipalidad a la Asociación, pero nuevamente no se me escuchó".
"A mediados del 2021, y solo luego que estallara públicamente el primer caso público de la Achifarp que se relacionaba con el no pago de un cheque, logré convencer que se renuncie al cargo de tesorero. Una vez que se renunció al cargo de tesorero, insistí en que la Municipalidad renuncie formalmente a la Asociación, ya que no era parte del directorio y se había decidido dejar de pagar la cuota durante años, pero el alcalde se negó permanentemente a ello", continúa el relato.
Aquella decisión, explicó Fernández, "deja una deuda millonaria a la Municipalidad de Valparaíso por no renunciar y no pagar la cuota, ya que la deuda siguió activa y sumando. Dicha deuda ahora es parte del proceso de liquidación forzosa de la institución y tiene demandada a las municipalidades por parte de los acreedores, por lo que yo sostengo que la liquidación forzosa de la Achifarp no solo se debió a la mala gestión, sino también a la irresponsabilidad, desidia y administración desleal de su tesorero en el cumplimiento de sus obligaciones legales".
Puntualizó además que si se comprobaran algunos de los cargos de fraudes, lavado de activos, cohecho en el caso Achifarp, "estos no hubieran sido posibles sin la complicidad y el encubrimiento realizado por el tesorero Sharp".
