"No nos dieron ni una colación, estuvimos
hasta las 2.30 de la mañana, no había ninguna locomoción a esa hora para mí, que estaba en una comuna distinta a la que vivo. De hecho, me tuve que poner al lado de un militar para que no me asaltaran".
Ese es parte del reclamo que realiza Diego V, de 35 años, quien fue vocal de mesa en un colegio de Pudahuel. Asume que también en parte es culpa suya, porque hoy vive en Maipú y nunca se cambió en el Servicio Electoral.
Pero su queja también apunta a que "
salí super tarde y el lunes a las 8 tenía que estar trabajando". A lo que se suma Alejandra Donoso Rosselot, quien en una carta a El Mercurio se identifica como presidenta Mesa 134 del Saint Georges College.
"La labor de vocal de mesa debe de ser de las
más abusivas que existen. Dos días de elecciones. Doce horas de trabajo el primero, y más de 17 el segundo. Sin tiempo para descansar, literalmente, ni un minuto. Llegar de vuelta a la casa a las 02:30 para salir a trabajar cinco horas después... Si esto no es pasar por encima de los derechos de las personas, no sé qué es", señaló.
Otro punto es el pago. Diego reclama que "recién nos pagarán antes de Navidad, más de un mes después. Y para peor, hay segunda vuelta acá en la Metropolitana. Estoy pensando seriamente inventar algo para no ser vocal esta vez".
Una vocal de mesa que tiene más vitrina para manifestar su descontento es
Carla Jara, rostro del matinal Buenos Días a Todos de TVN.
"No puede ser que no haya límite de candidatos, es inhumano estar revisando más de 1.200 votos. Empezó como una buena aventura y terminó siendo la peor experiencia! Para la otra me excuso. No, esto no puede ser... y la gente mañana igual se levanta temprano a trabajar. Lo encuentro terrible, de verdad terrible... estoy muy enojada. Que tengan buenas noches y ánimo a los que todavía siguen contando votos", concluyó a través de sus redes sociales.
"Héroes"
Ayer se le consultó por estas críticas a
Andrés Tagle, presidente del Consejo Directivo del Servel. "Ellos son los verdaderos
héroes", comenzó.
Y se hizo cargo de las quejas. "Estamos plenamente en conocimiento de eso. Parece irregular las papeletas en el suelo pero cuando son más de 100 candidatos los montones por candidatos no caben sobre la mesa, por eso recurren al suelo, otros hacen el escrutinio en una pizarra, los dos mecanismos son eficientes".
Sobre la alimentación expresó que "legalmente no tenemos la posibilidad de entregarles la comida, siempre ha sido que cada uno se la provee, hay una remuneración de por medio para los vocales".
De acuerdo con el Servel, los vocales que incumplan su obligación se exponen a ser sancionados con multas que varían entre 2 a 8 UTM, es decir, entre $133.122 y $532.488.
¿Cambios?
"El proceso eleccionario fue un desastre. Hubo vulneración de los derechos laborales de los pobres vocales que trabajaron 16, hasta 20 horas continuas. Se le advirtió al Servel en su momento y no hicieron nada", sostuvo Jorge Rathgeb, de RN.
Antes, un grupo de diputados, encabezados por Vlado Mirosevic (PL) había propuesto la presentación de un proyecto de ley que buscaba que quienes cumplieran deberes como vocal de mesa en las elecciones municipales y de gobernadores, tuvieran feriado ayer. No prosperó