"Es tiempo que Manuel Monsalve responda las consultas que están pendientes". Así abordó la trama judicial del exsubsecretario del Interior, la ministra de Trabajo, Jeannette Jara -hoy en calidad de vocera subrogante- luego que la declaración que dio el Presidente Gabriel Boric a Fiscalía se publicara en la prensa, y concitara más críticas al Mandatario.
En particular, a Boric se le adjudicaron incongruencias entre la versión que dio al Ministerio Público y la que hizo el 18 de octubre a los medios de comunicación, tanto en la calificación de la denuncia, como con el acceso de Monsalve a las cámaras del Hotel Panamericano.
En su extenso punto de prensa, el Mandatario señaló que "la ministra Tohá supo de una presunta violación y abuso sexual el día martes en la tarde", que por su gravedad, procedió a comunicárselo. Mientras que a Fiscalía afirmó que "tomé conocimiento de que existía una denuncia por abuso sexual y violación en contra del exsubsecretario Monsalve el día martes 15 de octubre alrededor de las 16:00 hrs., por habérmelo así indicado la Ministra del Interior Carolina Tohá".
Además, en primera instancia aseguró que Monsalve le comentó que "él había revisado las cámaras del hotel". No obstante, a Fiscalía sostuvo: "me indicó la ministra que Monsalve le solicitó a la directora de inteligencia de la PDI (Cristina Vilches) ver las cámaras del hotel".
En La Moneda, Jara defendió la postura del Mandatario sosteniendo que "hay una coherencia de la información entregada" y que advirtió que "no corresponde hacer otro tipo de interpretaciones".
"Se trata de una denuncia gravísima, dolorosa por lo demás, que genera todo nuestro repudio, con una víctima que tiene el debido derecho al resguardo y, por lo mismo, hemos colaborado y vamos a seguir haciéndolo con total transparencia para que la Justicia pueda cumplir con su rol", adujo.
Así, La moneda endureció el tono sobre la otrora autoridad, en días en que se ha sostenido que el caso Monsalve ha opacado la gira del Presidente Boric en Perú, donde participó en la APEC, y en Brasil, con motivo del G20.
Este domingo, el ministro de Relaciones Exteriores, Alberto Van Klaveren -única autoridad que se ha dispuesto a atender preguntas de la prensa en todo lo que va de gira- descartó que la trama judicial haya contaminado la agenda del Mandatario.
"La verdad es que no ha estado presente en ninguna conversación y tampoco ha estado presente en nuestra propia delegación", sostuvo, asegurando que "el Presidente Boric tiene muy claras sus responsabilidades en materia de política exterior. Nuestra prioridad en este momento es nuestra participación en estos dos grandes foros que reúnen las economías más importantes del globo. Esa es nuestra prioridad y a eso nos hemos dedicado y la verdad es que estamos muy tranquilos y muy abocados a este tema internacional".
Cabe destacar que desde que se conoció la denuncia por violación contra Monsalve, el Ejecutivo ha tenido dificultad para apuntalar su agenda, aún más con la información por goteo que ha resultado del caso. En particular, se ha visto complejo reimpulsar la agenda de seguridad, pese a que la ministra del Interior, Carolina Tohá, ha reforzado el despliegue en terreno y logrado despachar el proyecto de ley sobre narco-funerales.
Así las cosas, el Gobierno no es el único que endureció el tono con la otrora autoridad de Interior. En el oficialismo, el diputado del Partido Socialista, Daniel Manouchehri, sostuvo que "el Presidente ha actuado con transparencia en este caso y ha colaborado con la justicia activamente. Evidentemente Monsalve se debió ir en cuanto se conocieron los antecedentes, la denuncia era lo suficientemente grave para hacerlo. Fue un error la demora en la salida de Monsalve. Pero no se puede poner al mismo nivel el error del gobierno de no sacarlo más rápido, con el horror de lo que se le acusa a Monsalve".
"Monsalve actuó como un delincuente. En vez de asumir su responsabilidad e irse del gobierno y del PS en cuanto se vio involucrado, Monsalve trató de instalar teorías conspirativas, abusó de su poder y se opuso a la renuncia, teniendo el Presidente que forzarlo a renunciar. Todo lo que hemos sabido de Monsalve huele a podrido. Este caso se debe investigar a fondo, y se deben aplicar las máximas penas", fustigó.