Un paper publicado en una revista de ética médica ha incendiado la red, luego de que dos investigadores afirmaran que el aborto de un feto y el infanticidio de un recién nacido son “moralmente equivalentes” ya que ambos tienen el mismo potencial de convertirse en personas.
Los profesores de las Facultades de Filosofía de Milán y de Melbourne, Alberto Giubilini y Francesca Minerva, que sostienen esta polémica tesis en sólo seis páginas y titulado “Aborto pos parto: ¿por qué un bebé debiera vivir?, ahora están amenazados de muerte, según informa el “Daily Mail”.
El paper, publicado el 23 de febrero en la versión online de The Journal of Medical Ethics, ha obligado a los autores a defenderse, indicando que han sido desconextualizado.
En el artículo Giubilini y Minerva afirman que "el aborto posparto debería ser permisible en todos los casos en los que lo es el aborto. Incluso aunque el niño no presente ninguna discapacidad".
Señalan que si bien el aborto post parto no es una alternativa al aborto porque la mejor opción es realizar éste cuando el bebé está en estado de feto, añaden que después del nacimiento, por cualquier razón –ya sea por malformaciones e incluso situaciones económicas o psicológicas- los padres no debieran estar obligados a hacerse cargo del niño y de ahí que cabe la posibilidad del infanticidio.
El diario “El Mundo”, al terciar en la polémica entrevistó a Natalia López Moratalla, presidenta de la Asociación Española de Bioética y Ética Médica, quien afirmó que estos argumentos "carecen de fundamento desde el punto de vista médico, ético y científico".
El editor de la revista médica, Julian Savulescu, se ha visto obligado a emitir una nota justificando las razones que le han llevado a publicar dicha defensa del infanticidio.
"La novedad no radica en la defensa del infanticidio, cuyos argumentos se han repetido a lo largo de la historia", sostiene Savulescu, "sino en su aplicación en favor de los intereses de la madre y de la familia". De hecho, el abandono de recién nacidos para que muriesen era una práctica habitual en algunos periodos de la historia; y se sospecha que sigue teniendo lugar en algunos rincones del planeta, como China o India.