
Rara vez ocurre que el cáncer no se puede detectar siguiendo los pasos preventivos de examen Papanicolau y control ginecológico y eso se debe a que se trata de tumores poco frecuentes como adenocarcinomas (el tumor crece hacia adentro de los tejidos) y otros.
También no es frecuente que el cáncer se presente en forma simultánea con un embarazo. Cuando ello ocurre el caso es tratado en un comité multidisciplinario, que incluye todos los especialistas que participarán en el tratamiento, además, de la opinión del comité de ética de la institución en que consulta la paciente. Con la información y sugerencias será la paciente la que resolverá el momento del tratamiento, es decir, si lo hará inmediatamente (poniendo en riesgo el embarazo) o después del parto.
Hay que tener presente que las mujeres que sufren una histerectomía radical por cáncer del cuello del útero deben seguir en control periódico con el ginecólogo oncólogo con examen clínico y PAP, porque las lesiones se pueden originar ahora en el fondo de la vagina.