Yoko Ono y John Lennon es, tal vez, la pareja más representativa, rebelde y controversial de los años 60. Iconos del hippismo e ídolos gracias a “The Beatles”, la relación de Yoko y John derivó en varias rupturas: la de un matrimonio y la de un exitoso grupo musical.

Un tornado japonés

El 9 de noviembre de 1966, John Lennon fue invitado por un grupo de artistas llamados “Simposio de la destrucción del arte” a ver a una artista asiática de vanguardia que estaba exponiendo en Londres.

Una de las obras que presentaba era un martillo colgado, con varios clavos alrededor. Lennon preguntó si podía clavar uno de ellos y la artista respondió que no. El dueño de la galería le explicó de quién se trataba -uno de los famosos Beatles-, pero ella no tenía idea de qué le estaban hablando. Finalmente, cedió y le planteó a John que podía hacer su voluntad si le pagaba cinco chelines.

La expositora, de origen japonés, hija de banquero, cosmopolita, muy inteligente, con gustos artísticos extravagantes se llamaba Yoko Ono y resultó, al menos según Lennon, en extremo erótica.