River le ganaba 1-0 a Boca en la ida de las semifinales de la Copa Libertadores en el Monumental de Núñez.
Boca no jugaba bien, pero tuvo el empate a los 43'.
En una contra letal, Ramón Ábila aguantó bien la pelota y cedió para Nicolás Capaldo.
El volante quedó frente a frente con el arquero Franco Armani e increíblemente con un zurdazo muy potente la tiró por sobre el travesaño. Después el propio jugador se fue expulsado sobre el epílogo. Un partido para el olvido.
Finalmente River estampó su supremacía y venció por 2-0. Esa situación que erró Capaldo pudo haber cambiado la historia.