El ministro de Hacienda y Crédito Público de México, Carlos Urzúa, renunció este martes por las "discrepancias económicas" con el presidente Andrés Manuel López Obrador y por la "imposición de funcionarios sin conocimiento" de su cartera.
"Por los motivos anteriores, me veo orillado a renunciar a mi cargo. Muchas gracias por el privilegio de haber podido servir a México", dijo el ministro en su carta de renuncia difundida en redes sociales.
En su lugar, AMLO nombró al subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, como nuevo ministro de titular de la cartera.
Urzúa, considerado hasta ahora un estrecho colaborador de López Obrador, reprochó que "en esta Administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento"
"Estoy convencido de que toda política económica debe realizarse con base en evidencia, cuidando los diversos efectos que esta pueda tener y libre de todo extremismo, sea este de derecha o izquierda", expresó.
Unas convicciones que, dijo, "no encontraron eco" en el Gobierno de López Obrador, quien asumió la presidencia el 1 de diciembre de 2018.
Y añadió que le resultó "inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública", un hecho que "fue motivado por personajes influyentes del actual Gobierno con un patente conflicto de interés".
De todos modos, Urzúa manifestó su "profundo agradecimiento" hacia el presidente por haberle dado la "oportunidad de servir a México durante este primer año de Administración".
Cabe recordar que durante estos meses, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ha impuesto un plan de austeridad en toda la Administración propugnado por López Obrador, del izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Aunque siempre mostró prudencia, Urzúa apoyaba el pronóstico de López Obrador de lograr un crecimiento de la economía del 4 % anual al finalizar su mandato en 2024.
No es la primera renuncia del gabinete
La renuncia de Urzúa es la más relevante en los seis meses de Gobierno de López Obrador, aunque no ha sido la primera.
A mediados de junio, y en plena crisis migratoria, el titular del Instituto Nacional de Migración (Inami) de México, Tonatiuh Guillén, renunció a su cargo.
Esta dimisión coincidió con la del titular de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) de México, Jaime Rochín, quien denunció el 7 de junio que los cambios administrativos han reducido la calidad de atención de casos por parte de la entidad.
A principios de junio también renunció el titular de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), Guillermo García Alcocer.
Y en mayo hicieron lo mismo el titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Germán Martínez, y la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Josefa González-Blanco.