Como parte de un ambicioso plan de expansión que tiene por objetivo consolidar a la firma de supermercados minoristas colombiana Justo & Bueno como "la cadena de bajo costo más grande de América Latina", es que se espera que para 2020, la empresa controlada por el grupo Reve Group, aterrice en Chile.
Así lo reveló el CEO de Reve, Michel Olmi, en una entrevista con El Tiempo de Colombia, revelando que para cumplir "la apuesta de mediano plazo" el grupo invertirá cerca de US$18,4 millones -gracias a fondos entregados por socios y capitales privados de Australis Partners-.
Con esta inyección de capital, la minorista tiene entre sus planes lograr consolidar su marca en Colombia y Panamá -lugares en los que ya se encuentra funcionando-, a lo que se suma la idea de expandirse y llegar a otros países de sudamérica.
Además de entregar una mayor oferta a la hora de optar por un lugar para hacer las compras, la llegada de Justo & Bueno a Chile también significaría el ingreso al país de un modelo de negocios hasta ahora poco conocido y que difiere con las estrategias comerciales de los grandes supermercados, se trata del "hard discount".
¿De qué se trata? "Tiene que ver con una modalidad de negocios bien agresiva donde se venden productos convenientes a precios bien bajos. Está gatillado por grandes acuerdos comerciales con los capitales de categoría, que son los productos reconocidos en la industria que tienen harta rotación de venta, que llegan a acuerdo para vender a precio conveniente y también gatillados por marca propia. Es un poco a lo que se asemeja al modelo Acuenta de Walmart", explica a Emol el subdirector de consultoria Unegocios FEN Universidad de Chile, Pablo Barberis.
1.000Locales tiene Justo & Bueno en Colombia
Así, por ejemplo, dijo el experto, "todos los productos de alimentos de la canasta básica son de alta rotación. También está muy apalancado por marca propia, porque no necesariamente las principales marcas productoras de alta rotación llegan a descuentos que el concepto 'hard discount' propicia, entonces muchas veces eso lo compensan o lo apalancan con productos de marca propia".
Por su parte, al ser consultado sobre si es que considera que el modelo de negocio ha golpeado a los grandes supermercados y a las tiendas tradicionales en el resto del mundo, Michel Olmi fue claro en señalar que "este modelo democratiza el consumo. Hay espacio para todos, la competencia es sana y lo más importante es que el beneficiado ha sido y seguirá siendo el consumidor".
El perfil de Justo & Bueno
Fundada en 2014, la minorista colombiana ya cuenta con más de mil locales en funcionamiento, por medio de los cuales a la fecha ha generado cerca de 7.500 empleos directos en Colombia.
"Con algo más de 3 años apenas estamos empezando, pero vamos bien y aún nos falta complementar nuestra presencia tanto en los municipios en los que ya estamos como en los que nos falta llegar", indicó el CEO de la empresa.
"El país cambió el día en que nosotros trajimos los discounter a Colombia. Este modelo democratiza el consumo. Hay espacio para todos, la competencia es sana y lo más importante es que el beneficiado ha sido y seguirá siendo el consumidor"
Michel Olmi, CEO del grupo que administra Justo & Bueno
La empresa dice que su modelo comprende una amplia variedad de productos nacionales e importados como alimentos, bebidas, cuidado personal y hogar, de buena calidad a precios justos, algunos de marca propia; alianzas con cajas de compensación, empresas de servicios públicos y domicilios que facilitan el proceso de compra; y tiendas agradables, con un concepto alegre y cercano. Se declara pionera en la adopción de diferentes medios de pago en este tipo de establecimientos.
En cuanto al tamaño de los supermercados, Barberis explica que este modelo de negocios está principalmente orientado al posicionamiento de locales en barrios, por lo que se instalan en superficies no superiores a los tres mil metros cuadrados, en donde la capacidad operacional se hace reducida y por lo que en consecuencia cuentan con un número pequeño de empleados.
Sobre las ventas que genera la minorista, Olmi apunta a que "crece todos los meses, pero estamos cerca de los $300.000 millones (US$91 millones) mensuales. En 2019 registramos un crecimiento en ventas del 57%".
Desafíos de la minorista en Chile
Para Barberis la llegada de Justo & Bueno al país también se explica por la necesidad de satisfacer a un público que hasta ahora pareciera estar poco representado en la oferta que hoy existe en el mercado.
236%A crecido Justo & Bueno en Colombia desde el año 2016
"En Chile también la otra característica que tenemos, particularmente, y porque esta cadena está interesada en integrarse en Chile, es porque tenemos mucha inmigración colombiana y venezolana, que está hoy día comprando muchos productos colombianos que se importan desde Colombia a Chile, con la masa crítica de consumidores. Por eso también la cadena colombiana evaluó instalarse en Chile antes que en otros países", indica el economista.
"Este es el primer supermercado que atendería con foco 100% a una capacidad de inmigrantes que no la tiene el resto. Se declara una cadena colombiana, con productos colombianos. El desafío que ellos tienen es cómo llegar a una masa crítica de consumidores más allá de los inmigrantes, porque con solo inmigrantes no le dará el negocio, entonces la idea es que sea muy atractivo en precios, pero también en el mix de oferta de productos que le permita que la población chilena también adquiera estos productos y no solo se transforme en una cadena para inmigrantes", analizó.
A pesar de que en un principio la firma colombiana entraría a competir directamente con los locales de barrio, dentro de sus desafíos también estará quitarle protagonismo en el mercado a las grandes tiendas, tal cual ha sucedido durante los último años en Colombia.
Algunos referentes mundiales del modelo "hard discount" son la española DIA, la francesa Netto y las alemanas Lidl y Aldi
"Dada la situación económica que tiene Chile hoy en día, evidentemente la promesa de precios bajos es muy atractiva, el desafío es que realmente la cumplan, o sea, si el consumidor entra a la sala, que vea que el precio sea muy competitivo respecto a los pares, y segundo que tenga stock de productos atractivos también, porque en Chile los consumidores están habituados a comprar ciertas marcas, hay una concentración de proveedores que manejan gran parte del supermercado en pocas manos, por lo tanto son las mismas marcas que vemos siempre", puntualizó Barberis.