Los precios del petróleo registran este lunes su mayor desplome diario desde la Guerra del Golfo de 1991. Es que la OPEP y Rusia se han enzarzado en una guerra de precios después de no llegar a acuerdo en torno a un recorte en la producción para poder estabilizar los precios en medio de los efectos del coronavirus.
Se trata de una caída libre en los valores tanto para el Brent como para el WTI y que, según los expertos, podría seguir profundizándose e incluso llegar al territorio de los US$20 el barril.
Después de que Rusia se negara a recortar la producción, Arabia Saudita respondió anunciando que aumentaría la suya, lo que generó el derrumbe de los precios. Valores que ya venían cayendo producto de la menor demanda proyectada debido a las repercusiones económicas del Covid-19.
Así, durante este lunes negro para los mercados de todo el mundo, el precio del Brent -de referencia para América- caía más de 20%, hasta los US$35,80 el barril, su precio más bajo desde inicios de 2016. Por su parte, el WTI -referencia para Estados Unidos- retrocedía 22,80%, hasta los US$31,95.
Cabe destacar que durante la sesión los desplomes han incluso superado el 30%, su mayor caída desde la Guerra del Golfo.
"Creemos que la guerra de precios del petróleo entre la OPEP y Rusia comenzó inequívocamente este fin de semana", dijeron los analistas de Goldman Sachs Group Inc.
"El pronóstico para el mercado petrolero es aún más pesimista que en noviembre de 2014, cuando comenzó una guerra de precios similar, ya que se suma al colapso significativo de la demanda de petróleo debido al coronavirus", agregaron los expertos, entre los cuales figura Damien Courvalain.
Así, según los análisis del grupo de inversión, la actual pugna, sumada a los efectos del virus de Wuhan, podría arrastrar el crudo al territorio de los US$20.
Durante 2019, el precio del barril de crudo promedió US$64,05. En lo que va de marzo, y en medio de los efectos del coronavirus, el valor ha promediado US$52
"El crudo Brent podría llegar a caer a US$20 el barril, poniendo a prueba los niveles a los que algunos productores pueden operar", escribieron en un informe. Lo anterior, de acuerdo al banco, "cambia por completo las perspectivas para los mercados de petróleo y gas" y recortó sus pronósticos para el segundo y tercer trimestre a US$30 por barril.
Según Michel Salden, de Vontobel AM, la caída de los precios afectará especialmente a las explotaciones de petróleo no convencional y perjudicará a la "revolución verde" porque muchas economías optarán por consumir hidrocarburos al estar sensiblemente más baratos.
"Con el precio del crudo perdiendo los US$30 por barril, la mayoría de los países productores, entre ellos la totalidad de los de la OPEP, verán incrementar de forma alarmante sus déficits presupuestarios a estos niveles de precio", apuntan en Link Securities.