SANTIAGO.- Como una movida "
bastante inédita" calificó este miércoles el ministro de Hacienda,
Ignacio Briones, la solicitud que hizo el Banco Central al Fondo Monetario Internacional (FMI) en medio de los efectos de la pandemia del coronavirus, la cual consiste en una línea de crédito flexible de dos años por un monto de US$23.800 millones.
En línea con lo expuesto por el ente rector la noche de ayer, tras conocerse la petición, el titular de Hacienda remarcó en Radio Agricultura que "esto no está dirigido a aumentar el gasto fiscal (...), es un préstamo, no es una deuda que tome el Estado de Chile, no es la emisión de un bono, es una línea de crédito solicitada por el Banco Central y para el Banco Central, cuyo objetivo es acometer de mejor manera las funciones que le son propias en un contexto de mayor incertidumbre".
Asimismo, Briones explicó que "esta es una línea de crédito flexible que debe ser vista como un complemento a las reservas que tiene el Central, que tiene reservas internacionales que son fundamentales para buena parte de su accionar. Recordemos, por ejemplo, las intervenciones cambiarias, todo eso se mueve a través de las reservas internacionales".
En ese sentido, explicó que el crédito -el cual aún debe ser ser aprobado formalmente por el FMI- se trata de "reservas adicionales que no están en las bóvedas del BC, pero están a disposición a través de la línea flexible para poder usarlos cuando se estime conveniente y esto es valioso en tiempos de incertidumbre, porque no sabemos las volatilidades que pueda tener el tipo de cambio".
"Tener mayor reservas internacionales también fortalece la política monetaria que pueda hacer el Banco Central, entonces es una línea de precaución, preventiva, que hay que mirarla como la posibilidad de tener a la mano, rápidamente, reservas internacionales para el correcto accionar del BC en las materias que le son propias", profundizó.
"Una movida prudente", "de toda lógica"
Tras la solicitud del ente rector, Alejandro Alarcón, economista y académico de la Universidad de Chile, sostuvo que "es una medida razonable" y que, de ser aprobada, "es un premio a los buenos fundamentos de la economía chilena, porque este tipo de créditos sólo se dan a economías con estabilidad macro y sólidas".
"Lo primero es valorar que esta señal que da el FMI es una señal de confianza a la robustez y solidez macroeconómica de nuestro país y su solidez financiera"
Ignacio Briones
En ese sentido, y tras enfatizar que "no es ni por cerca un préstamo de emergencia ni un préstamo de última instancia", el experto analizó que la línea por US$23.800 millones "es un resguardo, porque la verdad nadie sabe el itinerario de la enfermedad, nadie sabe cuánto va a durar ni en qué condiciones funcionará la economía en los próximos meses":
"Esto está dirigido por la pandemia y creo que, ante ese nivel de incertidumbre, es buena idea tener liquidez adicional. Es una respuesta de toda lógica frente al nivel de incertidumbre que provoca la enfermedad sobre la liquidez de la economía", remarcó Alarcón.
Por su parte, el economista Juan Pablo Medina, académico de la Universidad Adolfo Ibáñez y que además es consultor para el FMI en diversos temas macroeconómicos y de política monetaria, indicó que no le parece que la solicitud sea "una jugada negativa por parte del Central, sino que lo veo como una movida prudente".
"Esto no es plata para el Gobierno, sino que para la política monetaria y la estabilidad financiera por la que vela el Banco Central. Además, tampoco significa que se va a usar inmediatamente o todo, sino que es solo un colchón para estar preparados"
Juan Pablo Medina
Lo anterior, porque significa "tener un colchón mayor frente a mayores eventualidades futuras y eso es bueno, porque si hay una crisis financiera internacional, donde hay mucho movimiento de flujo de capitales, es bueno tener esa línea de crédito para poder manejar mejor las operaciones del BC en su política monetaria y en el rol de estabilidad financiera".
En esa línea, Medina hizo hincapié en que "este apalancamiento podría usarse, pero es más que nada para estar preparados por si las cosas se ponen peor y el Central necesita espaldas más grandes para actuar".
