Antofagasta Minerals (AMSA) reconoció un retraso en las obras de la planta desalinizadora de su proyecto INCO Los Pelambres, debido al daño en una de las plataformas de construcción por las marejadas del pasado 12 de septiembre en Los Vilos.
"En ese momento, el regulador ambiental, la SMA, detuvo todas las obras marinas a la espera de la recuperación de los equipos y materiales perdidos. Esta restricción expiró el 3 de octubre y no ha sido prorrogada", explicó la firma en un comunicado.
En este contexto, la empresa señaló que
"las condiciones del mar continúan impidiendo la recuperación completa de todo el equipo perdido y esto ha impedido la reanudación de los trabajos de construcción marina desde que se hizo cumplir esta restricción en septiembre. Como consecuencia, la suspensión de las obras ha afectado al calendario de finalización del proyecto de la planta desaladora".
Ante esto, dijo que "se está finalizando un cronograma revisado que incorpora este retraso junto con el impacto del continuo oleaje en las obras marinas restantes", sin dar cuenta de una fecha estimada. Anteriormente, la empresa confiaba en iniciar la operación de la desaladora durante el cuarto trimestre.
Con todo, la empresa dijo que "no se espera que haya un aumento material en el costo total de capital del proyecto como resultado de la demora en la reanudación de las obras".
"A pesar de la revisión de la fecha de finalización de la planta desalinizadora, la disponibilidad de agua este año en Los Pelambres permitirá que la producción de cobre del Grupo en 2022 alcance el extremo inferior del rango guía de 640-660 000 toneladas", aseguró, reconociendo que que este retraso "afectará la producción previamente planificada en 2023 en aproximadamente 30,000 toneladas".
"Esto se reflejará en la guía de producción total de cobre del Grupo para el año, que se anunciará en el Informe de producción del tercer trimestre de la Compañía el 19 de octubre"