El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó esta mañana que la tasa de desempleo en Chile fue de 8,7%, durante trimestre móvil mayo-julio 2024, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Empleo (ENE).
La cifra significó un descenso de 0,1 pp. en doce meses, debido a que el alza de la fuerza de trabajo (2,4%) fue menor a la presentada por las personas ocupadas (2,5%). Por su parte, las personas desocupadas aumentaron 1,4%, incididas únicamente por quienes se encontraban cesantes (2,1%).
Respecto al mismo periodo del año anterior, las tasas de participación y de ocupación se situaron en 61,9% y 56,5%, creciendo 0,9 pp., en ambos casos. Por otra parte, la población fuera de la fuerza de trabajo disminuyó 1,4%, influida por personas inactivas habituales (-1,2%) e iniciadoras (-35,9%).
Los ocupados en dicho trimestre llegaron a 9.257.480 personas, 228.833 trabajadores ocupados más que hace un año. Sin embargo, la gran mayoría de esos nuevos empleos fueron informales, un total de 130.745, mientras que solo 98.088 fueron formales.
Es decir, el 57% de los empleos que se generaron en el país en un año fueron informales.
Del total de ocupados, 2.556.530 son informales, una tasa de informalidad que llegó al 27,6%, subiendo nuevamente en comparación a 12 meses atrás.
En concreto, la tasa de informalidad presentó un alza de 0,7 pp. en un año, encadenando su noveno trimestre consecutivo de alzas.
Región Metropolitana
En la Región Metropolitana, la tasa de desocupación del trimestre mayo – julio de 2024, alcanzó un 8,8%, con un descenso de 0,5 pp. en doce meses.
En el mismo período, la estimación del total de la población ocupada creció 2,3%, incidida, según sector económico, por comercio (5,9%), enseñanza (5,4%) y administración pública (7,3%).
Por sexo
En las mujeres, la tasa de desocupación se situó en 9,1%, aumentando 0,1 pp. en doce meses; debido a que el alza de la fuerza de trabajo (2,6%) fue mayor al de las ocupadas (2,5%).
Las desocupadas crecieron 4,1%; mientras que las tasas de participación y ocupación se situaron en 52,6% y 47,8%, incrementándose 0,9 pp. y 0,7 pp., respectivamente. Las mujeres fuera de la fuerza de trabajo, por su parte, descendieron 0,9%.
En los hombres, la tasa de desocupación fue 8,3%, con una disminución de 0,3 pp. en doce meses, a raíz del incremento de 2,3% de la fuerza de trabajo, menor al 2,6% registrado por los hombres ocupados. L
Los desocupados, en tanto, descendieron 0,8%, incididos por los cesantes (-0,6%) y aquellos que buscan trabajo por primera vez (-2,6%). La tasa de participación llegó a 71,6% y la tasa de ocupación se situó en 65,6%, con variaciones de 1,0 pp. y 1,1 pp., respectivamente. Los hombres fuera de la fuerza de trabajo se redujeron 2,3%.
Alza de personas ocupadas
En doce meses, la estimación del total de personas ocupadas experimentó un alza de 2,5%, incidida tanto por los hombres (2,6%) como por las mujeres (2,5%).
Los sectores que contribuyeron al aumento de la población ocupada fueron comercio (3,3%), administración pública (5,7%) y enseñanza (4,0%); mientras que, por categoría ocupacional, el alza se observó en personas asalariadas formales (3,3%) y trabajadoras asalariadas informales (4,2%).
Estacionalidad
La tasa de desocupación ajustada estacionalmente (que elimina los efectos de los factores exógenos estacionales de naturaleza no económica que influyen en su comportamiento coyuntural) se situó en 8,5%, aumentando 0,1 pp. con respecto al trimestre móvil anterior.
Horas de trabajo e indicadores de subutilización de la fuerza de trabajo
En doce meses, el volumen de trabajo, medido a través del número total de horas efectivas trabajadas por las personas ocupadas, descendió 0,1%; mientras el promedio de horas trabajadas decreció 2,6%, llegando a 36,8 horas. Según sexo, el promedio de horas para los hombres fue 39,0 y para las mujeres, 33,9 horas.
La tasa combinada de desocupación y fuerza de trabajo potencial alcanzó 16,4%, con una reducción de 0,3 pp. en el período. En los hombres se situó en 14,5% y en las mujeres, en 18,7%. La brecha de género fue 4,2 pp.