Un análisis de la influencia que han tenido los gobiernos de izquierda en la economía de los países de Latinoamérica realizó este jueves el presidente de Argentina,
Javier Milei, donde también abordó el caso chileno.
En el marco del discurso que efectuó en la Fundación Faro, Milei aseguró que la economía de Chile atraviesa un período de contracción, incidida por las políticas adoptadas por las administraciones que él denominó como progresistas.
"Los argentinos lo hemos vivido en carne propia. Habiendo tenido un modelo de país que nos convirtió en la primera potencia mundial, pero que fue abandonado importar el corporativismo europeo de principios del siglo XX. Lo mismo ha ocurrido en Chile, que en los últimos 40 años ha sido protagonista de una de las historias de progreso más impresionante de la región, y sin embargo se ha visto envuelto en un proceso de retroceso monumental en los últimos años", comenzó señalando el mandatario trasandino durante su alocución.
Para sustentar su afirmación, Milei citó a Axel Kaiser y atribuyó a la "pérdida de la batalla cultural" el avance de la centroizquierda tanto en Chile como en el resto de los países de la región.
"Lo interesante es que él (Kaiser) cuenta el caso de Chile. Y empieza a decir que el modelo chileno se va a caer. El punto es cómo se va a caer el modelo chileno con los resultados que estaba generando, era imposible, una economía que no tenía inflación, que venia creciendo al 6% per cápita. Había sacado una cantidad enorme de gente de la pobreza, estaban viviendo algo que era verdaderamente un milagro, estaban cerca de alcanzar el nivel de PIB per cápita de un país considerado desarrollado, y sin embargo él decía se va a caer", sostuvo.
Agregó que "justamente una de las cosas que él señalaba es que la izquierda había dado la batalla cultural, tomaron los medios de comunicación, tomaron la cultura, fueron contaminando y enfermando a la sociedad de socialismo, y cuando se quisieron dar cuenta tomaron el país y les arrebataron los logros, por lo tanto, también es muy importante esto".
"Cuando el Estado se hace propaganda para sí mismo, los políticos le tienen que vender la idea de que son importantes ¿Importantes para qué? Para sostenerse ellos. Entonces uno se da cuenta que además ponen toneladas de dinero en la cultura, es decir le pagan fortunas de dinero con los recursos de los pagadores de impuestos a artistas, para que justamente hablen en favor de ellos", complementó.
En ese sentido, Milei afirmó que "nos han pasado porque no hemos dado la batalla. Los zurdos se reagruparon, hicieron el foro de San Pablo y crearon la basura del siglo XXI, y ganaron elecciones a más no poder. En Argentina tuvimos cuatro períodos, en Uruguay Tabaré Vázquez y Pepe Mujica; en Chile Bachelet, Lagos, Boric; en Paraguay Lugo; en Bolivia Evo Morales; Castillo en Perú; Petro en Colombia; Lula y Dilma Rousseff en Brasil; López Obrador en México. ¿Se dan cuenta? Ni que hablar de Zapatero y Sánchez en España".
Puntualizó que "bajo el mandato del sentimentalismo y buenas intenciones, los colectivistas lograron en convertir en verdad indiscutible la mal llamada justicia social, que además se basa sobre una aberración que dice que donde hay una necesidad nace un derecho. Pero el problema que no hay tal cosa como un almuerzo gratis".
"Para aplicar la mal llamada justicia social, montaron un estado opresor que divide a los ciudadanos entre ganadores y perdedores, la política se volvió a su vez en árbitro y parte interesada en esa repartija. El famoso dicho de que 'el que reparte se queda con la mejor parte'. Sino pregúntenle a la condenada (Cristina Fernández)", acotó Milei.