El 29 de enero arrancaron los festejos del Año Nuevo Chino, el evento más importante para las cerezas chilenas, un periodo en el que se dispara el consumo de esa fruta en la potencia asiática dado que es considerada un producto de alto simbolismo, asociado a la prosperidad, el afecto y la confianza durante esta festividad.
Así, en las semanas previas, los más optimistas esperaban que en estos días los precios de la cereza en ese país mejoraran, dado el derrumbe del 50% que sufrió su valor China debido, principalmente, al exceso de oferta de cereza chilena que saturó el mercado, provocando un inesperado terremoto en el sector agrícola nacional.
Sin embargo, la mejora no ocurrió. "Los precios no repuntaron", sostuvo a Emol el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Antonio Walker, añadiendo que "al tener un año tan difícil en términos de rentabilidad, enfrentamos un periodo en capital de trabajo muy duro".
Walker señaló que, aunque todavía queda un "porcentaje menor de fruta por venderse, que es toda la producción del sur de Chile: Ñuble, Biobío, La Araucanía, Los Ríos, Los Lagos y Chile Chico, la temporada ya está jugada".
¿Las razones? Según dijo, este fenómeno se debe a que "tuvimos una sobreoferta de fruta, lo que produjo un 50% más de volumen del año anterior y además, hubo una menor demanda, producto de que
la economía China está mucho más débil de lo que nosotros pensábamos".
Por su parte, Víctor Catán, presidente de Fedefruta comentó: "Los precios de la cereza no repuntaron lo que hubiéramos esperado, tuvieron un deterioro importante en los precios".
Respecto a los próximos pasos para la industria, Catán indicó que intentarán diseñar y planificar una "buena estrategia para el próximo año", y es que confía que la demanda será mayor.
Mientras que Walker llamó a la unidad de los productores, procesadores y exportadores. "Debemos crear un sello de calidad voluntario para el futuro y definir cuál será el ente autónomo e independiente al que empoderemos para garantizar el sello de calidad Cereza Chile", dijo.
El líder de la SNA, además de destacar la importancia de seguir apuntando al mercado chino, donde "hay un gran potencial de crecimiento", también señaló la necesidad de
diversificar destinos hacia regiones como India, el sudeste asiático, Medio Oriente, África del Norte, Estados Unidos y Europa.
Asimismo, enfatizó en que, dado el alto valor y simbolismo de la cereza en China, es crucial ofrecer una fruta homogénea y de primera calidad para recuperar la confianza del mercado. "Llegó la hora de crear desde la unión", insistió.
Por último, hizo un llamado a la banca para apoyar a la industria en este complejo momento. "Vamos a necesitar más que nunca el apoyo de la banca para afrontar el año 2025".
