Un estudio reveló que la cantidad de trabajadores asalariados informales en el sector privado se acercan al millón.
En concreto, esa cantidad de empleados asciende a 900.018, según da cuenta la investigación elaborada por los economistas José Acuña y Juan Bravo, del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC-UDP) en conjunto con Cajas de Chile.
Otra de las principales conclusiones del informe es que el 82% de estos trabajadores (738.242 personas) se desempeña en empresas que pertenecen al sector formal, lo que evidencia que las organizaciones empleadoras, a pesar de operar en la formalidad, optan por vínculos laborales sin cumplir con las normas correspondientes.
El estudio distingue entre el empleo independiente informal, que corresponde a quienes no formalizan su actividad ante el Servicio de Impuestos Internos (SII), y el empleo dependiente informal, que implica la existencia de una relación de subordinación sin el pago de cotizaciones de salud o pensión.
"Ambas modalidades tienen una naturaleza diferente y, como tal, las herramientas de política pública deben ser diseñadas reconociendo esta diversidad para que puedan ser dirigidas en forma apropiada y sean eficaces en su cometido de reducir la informalidad laboral", señala el informe.
Caracterización del empleo informal
Según el informe, al trimestre noviembre 2024-enero 2025, la tasa de ocupación informal en Chile se ubicó en 26,3%, con un total de 2.467.359 ocupados informales.
De estos, 1.310.770 correspondían a trabajadores independientes informales y 1.156.589 a trabajadores dependientes informales.
Dentro de este último grupo, 135.240 eran asalariados del sector público, mientras que 1.021.349 se desempeñaban en el sector privado, incluyendo 121.331 personas en servicio doméstico y 900.018 asalariados privados informales.
El informe detalla que la tasa de ocupación informal entre los asalariados del sector privado fue de 15,6% en el periodo analizado.
Además, se detectó una mayor prevalencia de informalidad en mujeres y trabajadores extranjeros.
En cuanto a la jornada laboral, el 10,9% de los asalariados informales del sector privado trabajaba a jornada completa, pero esta cifra aumentaba al 46,8% en los empleados que ejercían a jornada parcial voluntaria y al 62,4% en aquellos que trabajaban en jornada parcial involuntaria debido al subempleo.
El análisis también destaca la implementación de una encuesta cualitativa dirigida a trabajadores independientes y dependientes informales del sector privado, la cual permitió profundizar en las causas, motivaciones y consecuencias de la informalidad.
Según el estudio, este tipo de información no está disponible en las encuestas socioeconómicas tradicionales.
Datos clave de la informalidad laboral en Chile
El informe presenta una serie de tiempo sobre la tasa de ocupación informal en Chile entre enero-marzo 2010 y junio-agosto 2017, lo que extiende la base de datos disponibles a 15 años de información.
Este registro permitirá nuevos análisis sobre el fenómeno y la formulación de políticas públicas más precisas.
Dentro de los hallazgos relevantes del estudio; entre los trabajadores por cuenta propia, la tasa de ocupación informal alcanzó el 65,5% en el periodo noviembre 2024-enero 2025, con mayor incidencia en mujeres y extranjeros.
A su vez, el 86,3% de los trabajadores independientes informales entre 15 y 24 años ejerce su actividad sin formalización.
El 34,8% de los trabajadores por cuenta propia informales tiene 55 años o más. Asimismo, que el 59,2% de los trabajadores independientes informales trabaja a jornada parcial, y el 77,5% desempeña su actividad en la calle o en la casa del cliente, dificultando la fiscalización.
Asimismo, cinco sectores concentran el 52,9% de los trabajadores por cuenta propia informales: comercio, construcción, transporte, servicios personales y agropecuario.
La tesis de un problema estructural en el sector privado
La principal preocupación que plantea el informe es que la informalidad no se limita a actividades económicas informales, sino que se extiende dentro del propio sector formal.
"Este antecedente es muy relevante, pues indica que a pesar de que la organización empleadora opera en el sector formal, está optando por generar empleos exigiendo subordinación pero sin cumplir con las normas laborales inherentes a estos vínculos", advierte el estudio.
En ese sentido, los autores subrayan que la informalidad laboral en los asalariados privados no solo impacta en la estabilidad y bienestar de los trabajadores, sino que también afecta la recaudación fiscal y el financiamiento de los sistemas de seguridad social.
Para enfrentar esta problemática, los economistas sugieren fortalecer la fiscalización y generar incentivos para la formalización laboral dentro de las empresas que operan legalmente pero recurren a la informalidad en la contratación de personal.
