Estalla el escándalo. El diario The New York Times publica una gran investigación que detalla varias acusaciones de acoso sexual y agresión contra Weinstein a lo largo de tres décadas. Las actrices Ashley Judd y Rose McGowan son las acusadoras más conocidas.
El diario reveló que Weinstein llegó a acuerdos financieros con al menos ocho mujeres para que guardaran silencio sobre los abusos.
"Me doy cuenta de que la manera en que me he comportado con colegas en el pasado ha causado mucho dolor, y lo lamento profundamente", sostuvo Weinstein.
Su abogado dijo que el ex productor "niega muchas de las acusaciones, que son totalmente falsas".
El directorio de la productora de cine Weinstein Company, que el magnate controla con su hermano Bob, se ve forzado a despedirlo unos días después.
Primera acusación de violación. La actriz y directora de cine italiana Asia Argento cuenta a la revista The New Yorker que Weinstein la violó en 1997. Otras dos mujeres también lo acusan de agresión sexual.
Las célebres actrices Gwyneth Paltrow, Angelina Jolie y Rosanna Arquette se unen a la lista de mujeres que denuncian a Weinstein por acoso.
Una portavoz de Weinstein señala que este niega todas las acusaciones de relaciones sexuales no consentidas.
Expulsión de la Academia. El directorio de la Motion Picture Academy of Arts and Sciences, la institución que otorga los Premios Oscar, vota para expulsar a Weinstein, cuyos filmes han ganado decenas de estatuillas a lo largo de los años.
A medida que pasan las semanas, más y más mujeres se animan a contar en público que han sido abusadas por Weinstein, tanto en las redes sociales como ante las cámaras de televisión.
Otros famosos de Hollywood y de varias industrias en Estados Unidos, de la banca a la gastronomía, la música o el periodismo, se encuentran de pronto bajo los focos por haber acosado o abusado sexualmente de mujeres. El movimiento #MeToo gana fuerza.
Weinstein es inculpado. Señalado de haber encajonado el tema años atrás, fiscales de Nueva York acusan a Weinstein de violación en primer y tercer grado contra una mujer no identificada en 2013, así como de obligar a la aspirante a actriz Lucia Evans a practicarle sexo oral en 2004.
Weinstein comparece ante un juez en una corte de Manhattan tras rendirse ante la policía, seguido por un enjambre de periodistas y fotógrafos.
Su abogado de entonces, Ben Brafman, negocia una fianza de un millón de dólares y asegura que su cliente será declarado no culpable. Weinstein debe portar un brazalete electrónico para quedar en libertad.
Una nueva acusadora. La fiscalía agrega tres nuevos cargos por un acto sexual "forzado" en julio de 2006 contra una tercera mujer, la asistente de producción Mimi Haleyi. Weinstein enfrenta ahora un total de seis cargos y puede ser sentenciado a cadena perpetua si es hallado culpable.
Abandono de cargos. La fiscalía acuerda abandonar los cargos relacionados con Evans tras revelar que la acusadora contó a una amiga que le practicó sexo oral de manera voluntaria a Weinstein a cambio de un papel como actriz.
Cambio de abogados. Weinstein despide a su famoso abogado Ben Brafman y contrata dos nuevos defensores. Seis meses después despide también a estos y contrata a un equipo dirigido por una mujer, la abogada de Chicago Donna Rotunno.
Una nueva inculpación. Los fiscales presentan una nueva inculpación que permitirá a la actriz de "Los Soprano" Annabella Sciorra participar en el juicio como testigo para corroborar relatos de las acusadoras.
Sciorra afirma que Weinstein la violó en el invierno boreal de 1993-94 en Manhattan. Su caso ya prescribió, pero los fiscales esperan que su relato ayude a convencer al jurado de que Weinstein era un depredador sexual.
El juicio, originalmente fijado para septiembre, fue aplazado al 6 de enero de 2020.
Acuerdo en efectivo. Weinstein alcanza un acuerdo por 25 millones de dólares con más de 30 actrices que lo acusan de acoso y abusos sexuales, en una demanda civil colectiva no vinculada a su juicio penal.
Bajo el acuerdo, Weinstein no tiene que admitir ninguna culpabilidad.
Un par de días después el ex productor da una inusual entrevista al diario New York Post desde un hospital tras una operación de espalda. En ella se queja de que el mundo ha olvidado de que fue un "pionero" en impulsar a las mujeres en el cine, lo cual provoca indignación.
Comienza el juicio en Nueva York