SANTIAGO.- En el mismo documento desclasificado en que la CIA confirmó que Augusto Pinochet "ordenó personalmente" el asesinato del ex canciller Orlando Letelier y su asistente Ronni Moffitt en Washington en 1976, el organismo reveló que el ex dictador presionó ante la justicia chilena para evitar la extradición del entonces jefe de la DINA, Manuel Contreras, sindicado como el responsable del atentado explosivo ocurrido en el barrio diplomático de Sheridan Circle.
"Los archivos también dejan claro que, cuando la investigación de las autoridades estadounidenses determinó que altos cargos de la Inteligencia y el Ejército de Chile fueron responsables, Pinochet decidió obstruir el caso para esconder su implicación y, en último término, para proteger su presidencia", reza el documento.
Según se desprende en el texto (que confirma la información revelada hace un año atrás, donde se citaba al entonces secretario de Estado George Shultz), en Agosto de 1978, Pinochet se reunió con el presidente de la Corte Suprema "a quien él había nombrado en mayo en orden a disminuir las chances de que la Corte pueda encontrar una causa legal para la extradición de oficiales implicados en el asesinato".
En la cita, según la CIA, el ex gobernante le pidió al magistrado que no extraditara a Contreras, porque "le había prometido a los generales de las Fuerzas Armadas que no sería extraditado por el impacto negativo que podría tener en la reputación del Ejército".
Ante esto, el magistrado "le prometió a Pinochet que haría todo lo posible para ver que la Corte cumpla con esta solicitud".
Esto habría quedado demostrado en 1979, cuando se le mostró a Pinochet "un borrador de la decisión de la Corte Suprema de denegar la solicitud de Washington de extraditar a Contreras, (Pedro) Espinoza y (Armando) Fernández Larios".
"El Presidente insistió que debía ser endurecido para excluir cualquier posibilidad de que el caso de extradición fuera revivido. El lenguaje fue cambiado para cumplir con la orden de Pinochet", agrega el informe.