GINEBRA.- Los investigadores de la ONU sobre la situación de los derechos humanos en Myanmar reiteraron el martes la demanda de tener "un acceso completo y sin trabas" al país, donde, dijeron, se registra una grave crisis humanitaria, a propósito de los problemas con la minoría musulmana rohinyas.
"Es importante para nosotros ver con nuestros propios ojos los lugares donde se produjeron esas presuntas violaciones y hablar con las personas afectadas y las autoridades", declaró el presidente de la misión, Marzuki Darusman, ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU reunido en Ginebra.
"Aprovecho esta ocasión para reiterar nuestra petición de cooperación dirigida al Gobierno de Myanmar, sobre todo dándonos acceso al país", agregó, especificando que este acceso debía ser "completo y sin trabas".
Esta misión de investigación de la ONU fue aprobada el pasado marzo por medio de una resolución, por consenso, del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Algunos países, como India y China, matizaron sin embargo que se "disociaban" de dicha resolución.
Por su parte, Myanmar denunció la creación de la misión de la ONU, que tildó de "inaceptable", mientras que el embajador ante el Consejo, Htin Lynn, reiteró que esta misión no era "útil para resolver el problema del estado de Rakáin [oeste]".
Unos 410.000 miembros de la minoría musulmana de los rohinyas se refugiaron en Bangladesh tras haber huido del estado de Rakáin, donde el ejército lleva a cabo una amplia operación en respuesta a los ataques perpetrados, el 25 de agosto, por rebeldes rohinyás contra varias comisarías de policía de la zona.
