BRUSELAS.- El Parlamento de Kosovo, votó este viernes a favor de la creación de sus propias fuerzas armadas, en esta antigua provincia serbia independiente desde hace una década. La decisión se da a pesar de la oposición de la minoría serbia y de Belgrado, la capital de ese país.
Los votos obtenidos permiten a este Estado con reconocimiento limitado crear un ministerio de Defensa y otorgar una misión militar a las Fuerzas de Seguridad de Kosovo (KSF), actualmente a cargo de seguridad civil. Falta el voto de un tercer texto sobre la organización de esta futura fuerza.
La OTAN "reexaminará" su papel en Kosovo
El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, lamentó la aprobación de esta medida por parte del Parlamento y anunció que el organismo "reexaminará" su papel en este territorio, cuya independencia unilateral de Serbia no reconocen todos los aliados.
"Lamento que esta decisión se haya adoptado pese a las preocupaciones expresadas por la OTAN", aseguró Stoltenberg en un comunicado, cuestionando el momento de la decisión, en un contexto de pésimas relaciones con Serbia.
Con la modificación del mandato de las Fuerzas de Seguridad de Kosovo para asumir misiones militares, según Stoltenberg, la Alianza "se verá obligada a reexaminar el nivel de compromiso de la OTAN con la KSF".
La integridad y la seguridad de Kosovo está garantizada por la KFOR, una fuerza internacional bajo estandarte de la OTAN desde la guerra de 1998-99, que dejó más de 13 mil muertos.
Según datos de la organización transatlántica, el número de efectivos desplegados en este territorio de la ex Yugoslavia es de 4.651 militares.
El secretario general de la OTAN, que calificó a la KFOR de garante de la "estabilidad en los Balcanes occidentales", urgió a todas las partes a no agravar la tensión en la región.
El diálogo entre Belgrado y Pristina
Stoltenberg aseguró que la entidad sigue apoyando el diálogo iniciado entre la capital serbia, Belgrado, y la capital de Kosovo, Pristina, bajo los auspicios de la Unión Europea. Según comentó, esto "constituye la única solución política duradera en la región".
Pero de momento, el diálogo está en punto muerto. Pristina exige que Serbia reconozca su independencia proclamada en 2008, mientras Belgrado inscribe en su Constitución su tutela sobre su antigua provincia, mayoritariamente poblada por albaneses.
Cuatro países de la OTAN no reconocen la independencia de Kosovo: España, Grecia, Rumanía y Eslovaquia. En el marco de la UE, a estos se les suma un quinto país, Chipre.