SANTIAGO.- Preocupación fue lo que se vivió el lunes en Alemania, cuando el diputado del partido de ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD) Frank Magnitz fuera internado de urgencia, luego de que un grupo de encapuchados aparentemente le propinara varios golpes cuando circulaba cerca de un teatro de la ciudad de Bremen, situación que fue calificada por su movimiento como un intento de homicidio.
Pero el hecho, que llegó a tensionar los ánimos entre las esferas políticas, tuvo un giro de 180° luego de que la Fiscalía de Bremen revisara las cámaras para verificar lo sucedido, donde consignaron varios sucesos distintos a lo relatado.
Según afirmó el portavoz de la Fiscalía de Bremen, Frank Passade, en declaraciones recogidas por El Mundo, "damos por hecho que la herida en la cabeza se la produjo él mismo al caer". En las imágenes se ve como, efectivamente, tres hombres se acercan a Magnitz, donde uno de ellos salta por detrás de él y lo empuja. Al mismo tiempo, no se constató el uso de un palo u otro elemento, ni menos la existencia de golpes posteriores a su caída.
A pesar de las crudas imágenes dadas a conocer por medios alemanes donde se muestra un corte importante en la frente del legislador, los investigadores creen que
esto se produjo tras su fuerte caída al suelo, por lo que la investigación sobre un supuesto intento de homicidio fue desechada y ahora se indaga por el delito de
lesiones corporales.
Esto contrasta con lo relatado por miembros de la AfD, quienes afirmaban que a Magnitz lo habrían abordado tres encapuchados que lo golpearon de forma reiterada con un palo en la cabeza, y luego lo patearon de forma sucesiva, cuando yacía en el suelo.
De hecho, el propio diputado ya había puesto en duda la tesis de un intento de asesinato en su contra, aludiendo a que no recordaba nada de lo ocurrido y que se podría haber tratado de un intento de robo, un hecho que se seguirá investigando con el político ya fuera del hospital, luego de que a dos días de su ingreso se le diera el alta.