SANTIAGO.- El proclamado Presidente encargado de Venezuela, el opositor
Juan Guaidó, condicionó un diálogo con el Mandatario
Nicolás Maduro a que se ponga fin a la "usurpación" y se lleven a cabo nuevas elecciones en el país, luego del llamado hecho por países como México y Uruguay.
En medio de un multitudinario acto con sus adherentes, el líder de la Asamblea Nacional aseguró que el régimen de Maduro está acostumbrado a convocar a "un falso diálogo" cuando "la presión le sube" y "la represión no les ha dado resultado".
Guaidó, de este modo, recordó que la oposición sí ha tenido antes la voluntad de sentarse a negociar con el oficialismo, como ocurrió en República Dominicana, la que finalmente no llegó a buen puerto. Y es por eso que señaló: "Que lo tenga claro el mundo y el régimen; aquí a falsos diálogos nadie se presta".
En este sentido, condicionó el diálogo a "un único elemento a discutir: cese de la usurpación, (creación de un) gobierno de transición y (convocatoria a) elecciones libres".
"Hay que convocar a elecciones lo más pronto posible. Todo el esfuerzo debe centrare a construir ese marco. Nuestro momento hoy es de los venezolanos, es de presión de ejercer nuestra soberanía", insistió.
Tanto el jueves como hoy, el Presidente Maduro manifestó su disposición a conversar con la oposición, al mismo tiempo que afirmó que Guaidó ha tenido diálogos con personeros de su Gobierno, información que el líder opositor evitó responder cuando se le consultó.
Mantenerse movilizados
En su alocución, Juan Guaidó hizo un llamado a la gente a mantenerse alerta y participar en la "gran movilización de la semana que viene", la cual aún no tiene fecha de convocatoria. "Claro que volvemos a la calle", dijo el dirigente.
Asimismo, reiteró su llamado a las Fuerzas Armadas a plegarse y apoyar su movimiento, por lo que le pidió a la ciudadanía a convencer a las familias militares. "Hermanos, esto es con ustedes, llegó el momento de ponerse del lado de la Constitución, llegó el momento de ponerse del lado del pueblo", afirmó.
Por otro lado, respecto a una posible detención suya y la posibilidad de que la justicia le retire su fuero parlamentario, el timonel de la Asamblea Nacional le bajó el perfil al asunto y recalcó que continuará en su cruzada.
"Se ha corrido mucho el rumor de si me van a meter preso o no. Yo estoy seguro que alguno de ustedes me podrá dar apoyo en su casa, pero nosotros tenemos que ejercer nuestras funciones en la calle, entendiendo que estamos en una dictadura (...) Aquí estamos, con el pecho y el corazón en la calle, con la frente en alto porque entendemos que estamos haciendo nuestra labor por el país".
En ese sentido, recalcó que "si se atreven (en el Gobierno) a secuestrar de nuevo el poder, yo les pido mantenernos en la ruta, de manera pacífica y no violenta".