Por orden del presidente Donald Trump, y en represalia por las caravanas de migrantes, Estados Unidos suspendió la ayuda a los países centroamericanos que integran el Triángulo del Norte.
"Por orden del secretario vamos a ejecutar la directriz del presidente y a poner fin a los programas de ayuda exterior de los años fiscales de 2017 y 2018 para el Triángulo del Norte. Vamos a implicar al Congreso en este proceso", explicó un vocero del Departamento de Estado al portal The Hill.
Anteriormente Donald Trump había amenazado en diciembre con terminar con esta medida exterior para El Salvador, Honduras y Guatemala luego de acusarlos de "no hacer nada por Estados Unidos, excepto coger nuestro dinero".
Por otro lado, el viernes pasado la secretaría de Seguridad Interior, Kirstjen Nielsen, dijo que había firmado un pacto regional "histórico" con representantes de estos países del Triángulo del Norte en la que estos accedían a "combatir el tráfico de seres humanos y a los criminales internacionales que alimentan la crisis y a fortalecer la seguridad fronteriza para impedir la migración irregular".
Sin embargo, el mismo viernes Trump dijo que estos países estaban "poniendo en marcha" las caravanas de migrantes. "Estamos pagando cantidades tremendas de dinero y no vamos a pagar más porque no han hecho nada por nosotros. Ellos ponen en marcha estas caravanas", de acuerdo a la información entregada por CNN.
El senador demócrata Robert Menéndez, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, criticó la medida. "Si lo hace, la decisión irresponsable del presidente Trump de cortar la ayuda a El Salvador, Guatemala y Honduras perjudica a los intereses estadounidenses y ponen nuestra seguridad nacional en peligro".
"La ayuda exterior de Estados Unidos no es caridad. Es una herramienta de nuestros intereses estratégicos y financia iniciativas que protegen a ciudadanos estadounidenses", argumentó el senador.