Los desórdenes comenzaron la noche del jueves 18, luego de que la policía de Irlanda del Norte se dirigiera al complejo de viviendas Creggan en Londonberry, en busca de armas y miembros de grupos disidentes. En el lugar les arrojaron bombas de gasolina y otros objetos, por lo que varios de sus vehículos resultaron dañados. Estos hechos atrajeron a una multitud de residentes y periodistas.
Una persona armada con el rostro cubierto salió por detrás del edificio, disparó a la policía y luego se escondió. Ningún funcionario policial fue herido, pero una de las balas impactó en la cabeza de la periodista Lyra McKee, de 29 años, quien falleció.
McKee era conocida por sus artículos sobre las dificultades de crecer siendo homosexual en Belfast y sobre el legado de la violencia en Irlanda del Norte. Su funeral se realizó el miércoles en Belfast.
Un pequeño grupo llamado Nuevo IRA admitió ser responsable de la muerte y ofreció disculpas a la pareja de McKee y su familia. Este inusual mensaje se percibe como una respuesta a la condena pública tras el tiroteo y el dolor general que causó la muerte de McKee.
El Nuevo IRA, que se ha tornado cada vez más violento en los últimos años, no acepta la decisión histórica del Ejército Republicano Irlandés (IRA) de dejar las armas y optar por el acercamiento político, una estrategia que significó la firma del Acuerdo de Viernes Santo en 1998 y que selló la paz tras años de violencia. El Nuevo IRA cree que desafiar la presencia británica en Irlanda del Norte es la mejor forma de lograr su objetivo final de unificar Irlanda.
Dos adolescentes fueron arrestados el fin de semana, pero luego liberados sin presentar cargos. Otra mujer de 57 años fue detenida el martes usando la ley contra el terrorismo, pero no ha sido identificada ni procesada. La policía no ha dicho qué rol se sospecha que pudo jugar en el asesinato.
No. El antiguo IRA, que protagonizó décadas de violencia en Irlanda del Norte, época conocida en inglés como "The Troubles" ("Los problemas"), era extremadamente bien organizada y tenía además apoyo internacional, con conexiones en el extranjero que les proveían de armas y explosivos. El IRA y sus líderes políticos, Gerry Adams y el ya fallecido Martin McGuinness, declararon el cese al fuego en 1994 y, a través de su brazo político Sinn Fein, colaboraron para el acuerdo de paz de 1998 que facilitó un gobierno de poder compartido, que incluye a quienes quieren una Irlanda unida y los que pretenden mantener lazos con el Reino Unido.
El IRA ya no funciona como un movimiento armado, aunque algunos pequeños grupos disidentes no han querido dejar las armas. De ellos, el Nuevo IRA es el que tiene mayor perfil, pero aún con escaso apoyo político y de la población.
El uso de armas de fuego contra la policía marcó la escalada y sigue una tendencia que ya fue expuesta en enero, cuando el Nuevo IRA fue responsable de un autobomba que no dejó lesionados en Londonderry, una ciudad llamada simplemente Derry por los locales, que resienten la presencia británica.
El grupo también se adjudicó la responsabilidad por una serie de cartas con explosivos enviadas a la isla de Gran Bretaña. Los servicios británicos de seguridad están ocupando más tiempo y recursos para monitorear a disidentes en Irlanda del Norte, y han calificado como "severa" la amenaza de más terrorismo en la región.
Sin embargo, los grupos disidentes no parecen estar ganando adeptos en la población general y el crimen -aparentemente accidental- de McKee sólo hizo aumentar aún más la distancia con ellos y el rechazo a la violencia.
Existe una gran incertidumbre sobre qué tipo de frontera existirá entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda (que no pertenece al Reino Unido), cuando se concrete la salida de la Unión Europea. Luego de la fecha límite, la frontera que hoy es invisible, será también una división entre el Reino Unido y la Unión Europea, lo que requerirá puestos de control y aduana.
Políticos, académicos y la policía han advertido que cualquier puesto fronterizo puede transformarse inmediatamente en un objetivo para grupos disidentes, tal como lo eran durante la violenta época de "Los problemas".