Un total de 41 personas murieron tras incendiarse un avión comercial Sukhoi Superjet 100 tras realizar la maniobra de aterrizaje en el Aeropuerto Internacional de Sheremetievo de Moscú, según un nuevo balance del Comité de Investigación de Rusia.
"Según se informó anteriormente, a bordo de la aeronave que cubría la ruta Moscú-Múrmansk se encontraban 78 personas, incluidos los tripulantes. Según el balance actualizado a disposición de la investigación en estos momentos, de ellas han sobrevivido 37 personas", explicó la vocera del Comité de Investigación de Rusia, Svetlana Petrenko.
El avión de la aerolínea Aeroflot, con 73 pasajeros y 5 tripulantes a bordo, había partido de Sheremetievo con destino Múrmansk, en el noroeste de Rusia, pero regresó al mismo aeropuerto 28 minutos después del despegue tras solicitar un aterrizaje de emergencia, lo que hace pensar que el problema pudo comenzar aún en vuelo.
Los ocupantes de la aeronave fueron evacuados por los toboganes de emergencia y la evacuación se realizó en 55 segundos, por debajo de los 90 segundos previstos en las normas, destacó el vocero de la compañía aérea.
Uno de los pasajeros, Dimitri Jlebushkin, explicó que el avión fue alcanzado por un rayo y se incendió al impactar contra la pista en un aterrizaje muy violento y extremo, información que no ha sido confirmada por el momento por las autoridades.
Las autoridades ya abrieron una investigación penal por incumplimiento de la normativa de seguridad con consecuencia de muerte para dos o más personas, indicó la agencia de noticias Itar-Tass.
