Un tribunal de apelaciones de Río de Janeiro determinó este miércoles que el ex Presidente brasileño Michel Temer, que enfrenta acusaciones de corrupción relacionadas con el caso Lava Jato, vuelva a la cárcel preventivamente.
"Para mí fue una sorpresa desagradable, pero mañana me presento voluntariamente", declaró el ex Mandatario afuera de su casa en Sao Paulo.
Temer, de 78 años, es apuntado por la Fiscalía como presunto cabecilla de "una organización criminal" integrada por políticos, acusada de desvíos millonarios en 2014.
El ex Presidente estuvo preso de manera provisional por orden de un juez de primera instancia a fines de marzo y fue liberado cuatro días después por orden de un juez del Tribunal Federal de la Segunda Región, que le concedió un habeas corpus por considerar que no existen motivos legales para mantenerlo preso antes de que concluya el proceso.
Pero este miércoles, por una votación de dos contra uno, el mismo tribunal determinó que Temer vuelva a prisión.
"En primer lugar, las decisiones de la Justicia se cumplen. En segundo lugar, la considero completamente equivocada desde el punto de vista jurídico. Siempre sostuve que en estas cuestiones no hay pruebas", declaró el ex jefe de Estado.
El abogado de Temer, Eduardo Carnelós, dijo a la salida del tribunal en Rio: "Sólo puedo lamentar [esta decisión]. Entiendo que no hay fundamentos para esa prisión. Los propios jueces entienden que no hay riesgo. El argumento es que existe la necesidad de dar un ejemplo a la sociedad. Veo la decisión como otra página triste de la historia reciente de la justicia brasileña".
El Ministerio Público Federal (MPF) investiga "crímenes de corrupción, desvío de fondos y blanqueo de dinero", con "pagos ilícitos" efectuados por un empresario "para la organización criminal liderada por Michel Temer".
La prisión preventiva se justifica, según el MPF, por la sospecha de que la presunta banda, que opera desde hace 40 años, sigue "en plena actividad", y que habría "obtenido la promesa, el pago o el desvío hacia la organización de 1.800 millones de reales", unos US$470 millones.