SANTIAGO.- En el marco de la jornada final del encuentro de líderes progresistas de América Latina, denominado "Progresivamente" y que se llevó a cabo en México, el grupo emitió una declaración pública, haciendo un llamado al diálogo en Venezuela y rechazando el encarcelamiento del ex Presidente de Brasil, Lula da Silva.
La declaración se da a conocer luego de tres días de trabajo en la ciudad de Puebla, donde el conversatorio organizado, entre otros, por Marco Enríquez-Ominami, reunió a 30 políticos de Chile, Brasil, Ecuador, Paraguay, Colombia, Uruguay, Argentina y México.
El documento titulado "Declaración de Puebla", firmado por los representantes de los ocho países, instó al diálogo en Venezuela, "como la única manera de lograr una solución pacífica para el conflicto político, económico y social que se vive", recalcando que "rechazamos cualquier intento de uso de la fuerza que socave el principio de solución pacífica de las controversias".
Por otro lado, el texto apuntó a la necesidad de responder ante "la guerra judicial o 'Lawfare' que se ha desatado en años recientes contra dirigentes progresistas de América Latina", señalando que ello se trata "de una forma inédita y agresiva de reemplazar las armas militares por la manipulación de recursos legales", siendo el caso de Lula el más emblemático, según sostuvieron.
En ese sentido, los firmantes -entre los que destacan el candidato presidencial uruguayo Daniel Martínez; el ex Presidente de Colombia Ernesto Samper; y el senador chileno y ex secretario general de la OEA, José Miguel Insulza- manifestaron que "los jueces e investigadores del caso (del ex Mandatario de Brasil), en punible connivencia, como quedó demostrado en la reciente revelación de conversaciones publicadas en el portal 'The Intercept', han violado sistemáticamente las garantías del ex presidente a un debido proceso como la presunción de inocencia, el principio del juez natural, el derecho a las instancias, la libre controversia de la prueba y la posibilidad de defenderse en la intimidad".
Con lo anterior el grupo anunció la constitución del Comité Latinoamericano por la Defensa de la Justicia y la Democracia, integrado por figuras de la región, cuyo objetivo será "diseñar acciones concretas para denunciar los casos de persecución jurídica contra ex jefes y jefas de Estado y líderes progresistas en Brasil, Ecuador, Argentina, Colombia y otros países latinoamericanos".
El encuentro contó también con la participación del senador mexicano Carlos Sotelo; el diputado argentino Felipe Solá, y los chilenos Karol Cariola, diputada, el senador Alejandro Navarro y el presidente del partido Progresista, Camilo Lagos.
Es "un grupo de articulación política transparente, un encuentro de reflexión entre progresistas, con hombres y mujeres libres pensadores, para preparar lo que viene e intercambiar ideas, legítimamente y de modo transparente", señaló el ex candidato presidencial chileno, Marco Enríquez-Ominami.
El conversatorio, en tanto, tendrá una segunda versión durante el segundo semestre en un país por definir.