Luego de que los trabajos para reconstruir la catedral de Notre Dame en París fueran interrumpidos por el riesgo de contaminación con plomo, este lunes las obras se reanudaron bajo estrictas medidas de seguridad para los trabajadores.
"Las obras se reanudaron a las 08:00 (02:00 horas de Chile) este lunes con unos 50 obreros como máximo", dijo el ministerio de Cultura francés a la AFP.
Asimismo, el prefecto de la región Ile-de-France, Michel Cadot, visitó las instalaciones en la mañana para constatar el funcionamiento de los implementos de seguridad dispuestos.
La Inspección del Trabajo dio luz verde a la reanudación de los trabajos -que fueron suspendidos el 25 de julio- luego de que se incorporaran distintas medidas de seguridad como pediluvios, duchas, vestimenta especial y un estricto protocolo de entrada y salida del lugar.
De ahora en adelante, el ingreso a la obra se realizará por una
única entrada y es obligatorio pasar por una
unidad de descontaminación. Además, todas las personas que penetran en el lugar deben desnudarse y vestirse de nuevo con ropa desechable, con el objetivo de garantizar la seguridad del personal que trabaja en la catedral y así
impedir la dispersión de polvo de plomo fuera de la obra, que está protegida herméticamente.
Asimismo, los trabajos están destinados a consolidar el edificio, evitando la caída de piedras o cualquier desequilibrio que pudiera dañar la estructura gótica.
Se espera que las obras de restauración propiamente dichas empezarán a partir del primer semestre de 2020.
Un "alivio"
Con el inicio de las actividades, el rector de la catedral, Patrick Chauvet, dijo este lunes sentirse "aliviado" por la "inquietud" que le genera ver el andamiaje que ya se encontraba en el sitio al momento del incendio ya que "siguen amenazando con caer encima de la bóvedas" que no fueron dañadas.
Tal como dijo a "France Info", Chauvet considera que los trabajos son "un signo de esperanza" y agregó que faltarán por lo menos cuatro meses para sacar los escombros de la zona.