Al menos una persona murió este sábado y otras diez resultaron heridas en un tiroteo masivo perpetrado entre las ciudades de Midland y Odessa, en Texas, informaron autoridades estadounidenses.
El portavoz de la ciudad de Odessa, Devin Sánchez, señaló que el responsable del ataque es un sujeto que disparó en reiteradas ocasiones desde el interior de un vehículo marca Toyota, en las inmediaciones de varios centros comerciales.
En un principio se creyó que eran dos atacantes, pero hasta ahora la policía estadounidense confirmó que se trataba de un sólo individuo, quien fue abatido en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad.
"Se ha confirmado que el tirador activo fue asesinado a tiros en el Cinergy en Odessa. No hay tirador activo en este momento. Todas las agencias están investigando informes de posibles sospechosos", dijo la policía de Midland.
De acuerdo a las autoridades locales, el responsable del atentado condujo por varias avenidas disparando a personas al azar, por lo que el número de víctimas fatales y de heridos podría aumentar con el correr de los minutos.
De todas formas, la policía de Texas hizo un llamado a la gente a permanecer en sus hogares y a no salir a las calles, por miedo a que aún existan más tiradores, situación que debe ser dilucidada.
Funcionarios del Departamento de Comunicaciones de la Casa Blanca aseguraron que el Presidente Donald Trump ya fue informado sobre las balaceras, y que en estos momentos está monitoreando la situación.