Íñigo Errejón, el que fuera número dos de Podemos y "amigo" de su líder Pablo Iglesias, anunció este miércoles que irá con lista propia a las elecciones legislativas españolas del 10 de noviembre, a las que la izquierda concurrirá muy dividida.
En una asamblea celebrada en la capital española, Errejón fue unánimemente apoyado como cabeza de lista por las bases de su plataforma, que para estas elecciones se denominará Más País.
"Estoy dispuesto a encabezar una candidatura que garantice un gobierno progresista", proclamó Errejón entre gritos de "¡presidente, presidente!".
"Damos un paso adelante para enfrentar la abstención" y hacer "más grande (...) el bloque progresista en España", añadió.
La plataforma no precisó en qué territorios se presentará, aunque previsiblemente lo hará en aquellas circunscripciones que eligen más diputados al Congreso, donde hay más margen para una fuerza emergente. En las más pequeñas, Errejón dijo que su plataforma pedirá el voto para "el bloque progresista".
Con este paso al frente se consuma la ruptura política y personal entre Errejón e Iglesias, quien encabeza el partido de izquierda radical desde su fundación en 2014, y en los últimos tiempos vio reducirse espectacularmente su círculo de allegados, con la partida de numerosas figuras descontentas con su liderazgo.
"Íñigo y yo éramos muy amigos; ahora no lo somos", dijo el propio Iglesias el martes.
El anuncio de este miércoles implica que el votante de izquierda se encontrará el 10 de noviembre con tres listas de ámbito nacional: la del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Pedro Sánchez, la de Más País, y la de Podemos, cuarta fuerza política de la cámara saliente.
La maniobra de Errejón, doctor en Ciencias Políticas de 35 años, se aceleró al concretarse la repetición electoral de noviembre, consecutiva al fracaso del PSOE y Podemos a la hora de articular una mayoría capaz de renovar como presidente del gobierno a Pedro Sánchez.
Un bloqueo que Errejón criticó duramente, diciendo que la repetición electoral es "resultado de la irresponsabilidad de los líderes políticos", en un clima de "desmoralización y cansancio de la gente progresista".
Y es que con la apuesta de Errejón, Berta Barbet, investigadora de la universidad Autónoma de Barcelona, cree posible "que la izquierda pueda votar entusiasmada otra vez", al menos en las provincias donde se presente su lista.
"Estoy dispuesto a encabezar una candidatura que garantice un gobierno progresista"
Íñigo Errejón
"Parece evidente que Podemos es la víctimas más fácil" de la competencia de Errejón, dijo a la AFP. Aunque éste también podría robarle votos por la izquierda a un PSOE que mira al centro del espacio político, con la esperanza de mejorar su resultado, apuntó.
La primera batalla entre Iglesias y Errejón, de orden táctico, estará en amarrar alianzas con partidos regionales, una estrategia diseñada por Podemos desde sus inicios para compensar sus carencias de implantación territorial.
Errejón tendrá el apoyo de Compromís, un partido de la región de Valencia que en el pasado fue a elecciones en coalición con Podemos. No contará en cambio con el de Cataluña en Común, que se mantiene fiel a Iglesias.
Una larga relación
Iglesias y Errejón, ambos doctores en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense de Madrid, se conocieron en la cafetería de la facultad por 2003.
En los inicios del partido, Iglesias no escatimaba elogios para su número 2 y vocero parlamentario, discípulo del teórico argentino del populismo Ernesto Laclau, y autor de una tesis sobre el Movimiento al Socialismo (MAS), la formación del presidente boliviano Evo Morales.
Pero la relación se agrió entre un Iglesias partidario de marcar duramente las diferencias con el PSOE, y un Errejón más posibilista y favorable al diálogo con los socialdemócratas.
El primer capítulo de su ruptura se escenificó en el congreso que Podemos celebró en Madrid en febrero de 2017, donde ambos competían por el liderazgo. Errejón perdió y fue descabalgado en favor de Irene Montero, quien además es pareja de Iglesias.
El segundo capítulo se produjo en esta primavera boreal, cuando en mayo Errejón decidió ir con lista propia -Más Madrid- a las elecciones regionales.
Avatares por los que en el PSOE algunos se frotan las manos.
Podemos "ha perdido la horizontalidad, se ha convertido en un partido tremendamente vertical y ha incurrido en el caudillismo", dijo incisivo el portavoz del PSOE, Óscar Puente, en una entrevista con el Huffington Post.