La Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) denunció este martes que decenas de personas murieron y otras resultaron heridas durante las protestas que comenzaron el viernes pasado en Irán, y que ya han dejado más de mil manifestantes detenidos.
"Algunas muertes han sido reconocidas por las autoridades, pero está resultando extremadamente difícil verificar el número total de fallecidos y heridos", afirmó Rupert Colville, vocero de la instancia encabezada por la chilena Michelle Bachelet.
Asimismo, Colville expresó también la preocupación por la "violación de las normas internacionales por el uso excesivo de la fuerza, incluyendo los disparos con munición real contra los manifestantes" en las protestas que han tenido lugar en más de 40 ciudades de ocho provincias iraníes.
"Instamos a las autoridades iraníes y a las fuerzas de seguridad a evitar el uso de la fuerza para dispersar las manifestaciones pacíficas y, en caso de que sean violentas, a limitar el uso de la fuerza en la mayor medida posible", manifestó el vocero.
Por otra parte, también pidió a los manifestantes que en las protestas no hagan uso de la violencia física ni destrocen propiedades para evitar que se repitan los graves disturbios tales como los cortes de carreteras, incendios en sucursales bancarias y bencineras, saqueos a tiendas e intentos de asalto a comisarías policiales.
Colville añadió que para evitar que continúen las protestas, iniciadas por el aumento del precio de las bencinas, las autoridades mantienen bloqueado desde el sábado pasado el acceso a internet, lo que está dificultando la actividad laboral en el país.
"Pedimos a las autoridades que restablezcan de inmediato el acceso de los iraníes a internet, así como a otras formas de comunicación, y que permitan la libertad de expresión y el acceso a la información", destacó.
El vocero especificó que tal y como se ha podido observar en las protestas que han tenido lugar los últimos meses en diferentes partes del mundo, responder con "palabras duras y puño de hierro" significa no solo a arriesgarse a violar las normas internacionales, si no a "agravar seriamente la situación".
