Familiares y amigos se reencuentran con sus seres queridos en el aeropuerto de Kiev (Ucrania) tras ser liberados de la cárcel por los prorrusos.
EFE
Rusia elogió este lunes el canje de prisioneros de guerra realizado el domingo entre Ucrania y los separatistas prorrusos y expresó la esperanza de que esas iniciativas entre ambos bandos en conflicto en el Donbás continúe en 2020.
"En Moscú saludamos este importante paso de carácter humanitario que permitió a decenas de personas retornar a sus familias y recibir en Año Nuevo junto a sus familiares y allegados", expresó este lunes el Ministerio de Exteriores de Rusia a través de un comunicado.
Este domingo Ucrania y los separatistas prorrusos llevaron a cabo el primer canje de prisioneros de guerra desde 2017, durante el cual fueron liberadas 200 personas.
El organismo diplomático añadió que espera que "en 2020 continúe el trabajo (...) para continuar liberando a todas las personas retenidas en sintonía con las medidas aprobadas en Minsk en base al principio de 'todos por todos'".
Por su parte, el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, distanció a Rusia de este proceso, al señalar que se trata de un intercambio gestionado exclusivamente por Ucrania y las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, aunque admitió que el Presidente ruso, Vladímir Putin, "utiliza su prestigio" para impulsar el intercambio.
"El Mandatario ruso no participa en estas conversaciones, en estos contactos, el Presidente ruso utiliza su influencia, su autoridad, para propiciar la realización de un intercambio de este tipo", apuntó.
Peskov insistió que el canje se lleva a cabo entre las partes en conflicto y aseguró que Rusia no es parte de él.
El vocero del Kremlin reiteró que las autoridades de Kiev prácticamente no sostienen contactos directos con los representantes de las repúblicas no reconocidas.
Entre los reos intercambiados hay soldados, milicianos, mercenarios, policías y activistas de ambos bandos, algunos de los cuales estuvieron retenidos por el enemigo casi desde el estallido del conflicto en el este de Ucrania (2014), en el que han muerto más de 13.000 personas.
Después de dos años de ineficaces negociaciones, este asunto fue desbloqueado en la reciente cumbre de París del 9 de diciembre en la que se reunieron por vez primera el Presidente ucraniano Volodímir Zelenski y su homólogo ruso, Putin.
En ese momento, en presencia del Presidente francés, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel, se llegó al acuerdo de un canje de todos los prisioneros antes de que terminara el año.
Según la Presidencia ucraniana, en el marco del canje -una de las promesas electorales de Zelenski fue liberar a todos los ucranianos en manos de los separatistas y de Moscú-, Kiev recibió a 76 personas (51 de Donetsk y 25 de Lugansk).
Mientras, los prorrusos recibieron a cambio 124 personas -otras 34 incluidas en la lista original se negaron a regresar a territorio separatista-, según confirmó la defensora del pueblo de Donetsk, Daria Morózova, a la prensa rusa.