Las autoridades japonesas anunciaron este martes que registraron un caso de coronavirus en su territorio en un hombre que no viajó a China, pero sí transportó en un autobús a turistas de Wuhan, ciudad china donde surgió la epidemia.
Este hombre de unos 60 años, que vive en la ciudad turística de Nara, transportó en enero en autobús a dos grupos de turistas de Wuhan y fue hospitalizado el sábado con síntomas similares a los que provoca este virus, indicó el ministerio de Salud.
La cifra de fallecidos por la nueva enfermedad vírica que está causando preocupación en todo el mundo aumentó en 25 personas, hasta al menos 106, el martes, mientras Estados Unidos y otros gobiernos se preparaban para sacar a sus ciudadanos de la aislada ciudad china donde comenzó el brote.
Entre las víctimas mortales se incluye la primera registrada en la capital de China, Beijing, el lunes y otras 24 en la provincia de Hubei, donde se detectó el coronavirus por primera vez en diciembre.
Las medidas de contención adoptadas por China, que son cada vez más estrictas, comenzaron con la suspensión de los viajes de avión, tren y bus en Wuhan, una ciudad de 11 millones de habitantes. La cuarentena se amplió a 17 ciudades, con una población total de más de 50 millones de personas, en el dispositivo de control de enfermedades más grande de la historia.
Beijing amplió las vacaciones por el Año Nuevo Lunar en tres días, hasta el domingo, para reducir el riesgo de contagio al hacer que la población se quede en sus casas por el cierre de oficinas y fábricas en todo el país. El gobierno de Shanghái, un importante centro financiero con 25 millones de habitantes, amplió las vacaciones en una semana más, hasta el 9 de febrero.