Los habitantes de la ciudad china de Wuhan, donde fue identificado en diciembre el coronavirus, están siendo autorizados a reanudar su trabajo mientras que los transportes públicos vuelven a funcionar luego de dos meses de cuarentena.
Este levantamiento de las restricciones de forma gradual se produce al mismo tiempo que el Ministerio de Salud anunció este lunes que no se registró ningún caso nuevo de contagio por quinto día consecutivo en esta metrópolis de 11 millones de habitantes y cuna de la actual pandemia.
Sin embargo, sí se informó de
39 casos importados en todo el territorio chino, durante los últimos días.
Los habitantes de Wuhan que están en buen estado de salud pueden desplazarse dentro de la ciudad y tomar autobús o metro una vez presentada su tarjeta de identidad, explicaron las autoridades.
También pueden volver a sus lugares de trabajo si disponen de un permiso emitido por el empleador y están autorizados a dejar Wuhan para viajar a otras partes de la provincia de Hubei, de la que forman parte, solo si han sido declarados negativos a los tests de Covid-19 y son portadores de un certificado médico.
A aquellos que la cuarentena y el cierre de la ciudad los dejó afuera de sus hogares pueden, desde hoy, volver a la urbe. Ayer llegó el primer tren con 1.000 trabajadores.
La propagación del coronavirus en esta metrópolis generó el 23 de enero
la orden de cuarentena por parte de las autoridades. Y casi la totalidad de las demás ciudades de la provincia de Hubei aplicaron las mismas medidas.
Hasta ahora, la población tenía prohibido salir de los límites del municipio de su residencia.
Aunque el Ministerio chino de Salud anunció este lunes otros nueve fallecimientos en China -todos en Wuhan- el número de contagiados cayó de forma consistente en las últimas semanas. La mayoría de los casos son ahora de personas llegadas del extranjero.
Con un total de 81.093 casos y 3.270 muertes oficialmente registrados, China es hoy el segundo país más afectado del mundo por la pandemia, después de Italia.
