Camino a la "nueva normalidad": El mundo ensaya una reapertura gradual tras semanas de cuarentena

En ese contexto, el llamado del Ejecutivo es a adaptarnos a esta nueva situación, donde el coronavirus estará presente durante mucho tiempo y ninguna cuarentena total logrará eliminarlo del territorio. La propuesta, sin dudas, genera mucha discusión, sobre todo en un contexto donde son varios los países del planeta que han implementado el confinamiento como medida principal para frenar el avance del virus y que han estado varias semanas así, mucho más que Chile, que sólo ha impulsado cuarentenas parciales en ciertas comunas.

De esta forma, en La Moneda miran con atención lo que pueda ocurrir en Europa, donde varios países ya están planeando un retorno gradual de las actividades en su territorio, aunque siempre con el temor de que se desate una segunda ola de infecciones. No obstante, en muchos casos se trata de naciones que de cierto modo han frenado la curva de contagios y donde el covid-19 apareció unas tres semanas antes que en Chile.

Es el caso, por ejemplo, de República Checa, país con 6.838 contagiados y 194 muertos que este lunes inició su plan de cinco fases que busca llegar a la normalidad el próximo 8 de junio. De este modo, a partir de hoy pueden abrir los mercados callejeros, concesionarios y bazares de vehículos y también los centros de entrenamiento de deportistas de élite. Asimismo, podrán celebrarse bodas con un máximo de 10 personas.

Así, de no mediar algún inconveniente, se espera que en una semana más abran todos los pequeños comercios de una superficie de hasta 200 metros cuadrados, siempre que no estén en centros comerciales. Ya para el 25 de mayo se espera la reapertura de peluquerías, restaurantes y cafeterías que dispongan de una terraza al aire libre, museos, galerías y parques zoológicos. Finalmente, el 8 de junio se prevé que vuelvan a la actividad todas las tiendas en grandes centros comerciales, así como los espacios interiores de restaurantes y cafeterías, además de hoteles y taxis.

Dinamarca y Noruega son dos países que este lunes también comenzaron con el levantamiento de restricciones por la pandemia, con la apertura de algunos pequeños comercios, que se suma a la reanudación de la actividades escolares.

De hecho, el pasado 15 de abril Dinamarca fue el primer país de la Unión Europea en volver a abrir jardines infantiles y colegios, para alumnos de hasta quinto grado. En tanto, Noruega, que no forma parte del bloque comunitario, hizo hoy lo mismo con las guarderías y, dentro de una semana, comenzarán a funcionar escuelas hasta cuarto año.

Los gobiernos de ambos países han justificado el inicio de la reapertura con el aval de las respectivas autoridades sanitarias ante la buena evolución de la epidemia, con descenso continuo del número de ingresos hospitalarios y un índice de contagio por persona infectada inferior a uno (Dinamarca registra 7.711 contagios y 364 muertos, mientras que Noruega tiene 7.122 casos y 171 decesos).

"Es importante abrir para los más pequeños, porque sabemos que son los que menos enferman. En las escuelas habrá que hacer más ajustes. También es importante para el desarrollo de los niños estar con otros y recibir contenidos pedagógicos", declaró la Primera Ministra noruega, Erna Solberg.

No obstante, esta medida no ha tenido mucha aceptación ciudadana, ya que son varios los padres noruegos que han mostrado su oposición en grupos en redes sociales, mientras que la Federación de Municipios danesa ha alertado de que es "inviable" abrir todas las clases antes de las vacaciones de verano, debido a las exigencias de seguridad e higiene impuestas por las autoridades.

En ambos países también pueden reanudar ya su actividad dentistas, psicólogos, fisioterapeutas, ópticas y podólogos, entre otros, y, mientras que en Dinamarca hoy ya podrán abrir peluquerías, masajistas y tatuadores, en Noruega no será hasta dentro de una semana. La reapertura de pequeños comercios está plagada de restricciones, que incluyen desde eliminar las salas de espera hasta limitar el número de clientes, extremar la higiene y usar mascarillas y otro material protector.

Se trata de una primera fase de normalización de la actividad económica, a la que podría seguir el próximo mes una reapertura controlada de bares y restaurantes, que en Dinamarca solo funcionan en servicio de comida a domicilio, y en Noruega, con restricciones, en algunos municipios.

También este lunes, Alemania inició la reapertura gradual de locales comerciales, luego del acuerdo alcanzado el pasado miércoles entre el Gobierno de Angela Merkel y los líderes de los 16 Estados federales del país.

De este modo, hoy levantaron sus persianas las tiendas de alimentación, librerías o concesionarios de automóviles, entre otros negocios, siempre y cuando su superficie no supere los 800 metros cuadrados.

La medida llega en un momento que el Ejecutivo alemán ha sido destacado, no sólo en su país, sino que también a nivel internacional, por su gestión ante la llegada del coronavirus a su territorio. Tanto así que el ministro de Salud, Jens Spahn, destacó el viernes que la pandemia ya es "controlable", cuando registran 146.200 casos y 4.669 muertes.

Merkel consideró que, entonces, el "mejor camino" para superar la pandemia del coronavirus es el de la "cautela" e insistió en que el reto al que se enfrenta el sistema sanitario es del ser capaz de"rastrear todas las cadenas de infección".

Y si hoy son varios los países que comenzaron su periplo a esta "nueva realidad", también hay otros donde el covid-19 afectó de peor manera pero que de igual manera están planificando una reapertura en los próximos días. Es el caso de Francia, donde el Gobierno está considerando un desconfinamiento a partir del 11 de mayo, el que será muy gradual.