Brasil registró 14.919 nuevos casos de covid-19 este sábado, con lo que el total de contagiados llegó a 233.142, según informó el Ministerio de Salud en un nuevo balance. Con esto, escaló al cuarto lugar en la lista de los países más afectados por la enfermedad en el mundo, por encima ahora de España (230.698) e Italia (224.760).
Brasil, epicentro del nuevo coronavirus SARS-CoV-2 en América Latina -y que esta semana ya había sobrepasado en número de contagios a Francia y Alemania-, ahora sólo es superado por Estados Unidos (1.450.269), Rusia (272.043) y Reino Unido (241.455), pero su acentuada curva ascendente permite prever que en pocos días llegará al segundo lugar en la lista.
De acuerdo con el boletín divulgado por el Ministerio de Salud, Brasil registró este sábado 816 nuevas muertes por covid-19, con lo que la cantidad de víctimas se mantuvo por encima de las 800 diarias por tercer día consecutivo y llegó al total de 15.633 en sólo dos meses, desde el primer fallecimiento por la pandemia el 16 de marzo.
Tras haber registrado un récord de 881 muertes el martes, cuando fueron incluidas algunas ocurridas en el fin de semana y que no habían sido contabilizadas, el número cayó a 749 el miércoles, pero desde entonces ha permanecido por encima del listón de 800: el
jueves fueron 844, el viernes 824 y este sábado 816.
En la lista de países con más muertes por la enfermedad, según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Brasil sigue en la sexta posición por detrás de Estados Unidos (87.841), Reino Unido (34.456), Italia (31.610), España (27.563) y Francia (27.532).
El Ministerio informó igualmente que el número de pacientes que se han recuperado llegó a 89.672 (38,5% del total), que otros 127.837 (54,8%) siguen hospitalizados o bajo observación médica y que aún espera el resultado de los exámenes para determinar si otras 2.304 muertes sospechosas se produjeron por coronavirus.
Las previsiones indican que los contagios y las muertes seguirán creciendo de forma exponencial en este país de 210 millones de habitantes y que el peak de la enfermedad sólo se producirá en las próximas semanas.
Bolsonaro insiste en criticar distanciamiento
Pese al agravamiento de la situación, el Presidente brasileño, Jair Bolsonaro, volvió a criticar este sábado las medidas de distanciamiento social adoptadas por gobiernos regionales para combatir la pandemia, lo que incluso provocó la renuncia de su segundo ministro de Salud en menos de un mes.
"El desempleo, el hambre y la miseria será el futuro de aquellos que apoyen la tiranía del aislamiento social", afirmó en un mensaje en Twitter el Mandatario, uno de los gobernantes más escépticos sobre la gravedad del virus y que llegó a calificarlo como una "gripecita".
El coronel de la reserva del Ejército mantiene un duro y tenso pulso con los gobernadores de la mayoría de los estados brasileños, que han impuesto medidas de distanciamiento social, como cuarentenas, cierre de escuelas y comercios y restricciones al transporte y la movilidad, para frenar la creciente expansión de la pandemia en el mayor país latinoamericano.
Para Bolsonaro, más preocupado con la paralización del país, la ya prevista recesión histórica y los millones de empleos destruidos por la crisis sanitaria, el covid-19 "va a contagiar al 70 % de la población tarde o temprano" y "va a matar mucha gente" sin importar las medidas de distanciamiento que se adopten.
Esta posición provocó el viernes la renuncia del ministro de Salud, Nelson Teich, el segundo titular de la cartera en caer en menos de 30 días.
Su antecesor, Luiz Henrique Mandetta, un férreo defensor de las medidas de distanciamiento social, fue destituido en abril igualmente por sus divergencias con Bolsonaro en cuanto a las medidas necesarias para frenar el avance del virus.
En el lugar de Teich asumió como ministro interino de Salud el general Eduardo Pazuello, un militar sin experiencia en el área y que desde el mes pasado ejercía como viceministro.