El presidente ruso, Vladimir Putin, no viajará a la cumbre de líderes del G20 en Bali la próxima semana, anunció el jueves a la agencia AFP la embajada rusa en Indonesia.
"Puedo confirmar que (el ministro de Relaciones Exteriores) Serguéi Lavrov liderará la delegación al G20. El programa del presidente Putin todavía se está trabajando, podría participar virtualmente", indicó Yulia Tomskaya, jefa de protocolo de la embajada.
Desde hacía meses se especulaba sobre la presencia o no de Putin en esta cumbre que tiene lugar el 15 y 16 de noviembre en esta turística isla de Indonesia.
Después de importantes reveses militares para Moscú en Ucrania, el Kremlin busca proteger a su líder de la condena de los países occidentales durante ese encuentro de los líderes de las 20 principales economías mundiales.
El presidente estadounidense, Joe Biden, que tachó a Putin de "criminal de guerra", aseguró que no tenía intención de reunirse con él en Bali aunque el dirigente ruso acudiera a la cumbre.
Otra fuente conocedora de la agenda rusa para el evento también dijo a la AFP que Putin no viajará y confirmó que sería reemplazado por Lavrov.
Esta persona señaló que no estaba claro si el presidente ruso comparecería virtualmente.
El jefe de la diplomacia rusa abandonó una reunión de ministros de Relaciones Exteriores del G20 en Bali en julio ante las críticas de las potencias occidentales a la invasión de Ucrania.
Presión sobre Indonesia
Indonesia recibió fuertes presiones de parte de los países occidentales para excluir a Rusia del encuentro como reacción a la guerra de Ucrania, pero el país huésped defendió su neutralidad de cara al evento.
Su presidente Joko Widodo aseguró que Putin sería invitado a la cumbre a pesar de la guerra. En agosto, dijo que el dirigente ruso había aceptado la invitación.
Yakarta también invitó a participar virtualmente en la cumbre al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, aunque su país no forma parte del G20.
La postura occidental ante Putin tampoco es completamente homogénea.
Mientras Biden ha evitado cualquier contacto con su par ruso desde el estallido de la guerra, Francia se ha mostrado contraria a aislar por completo a Putin en la escena internacional.
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha mantenido comunicaciones con el Kremlin en los meses recientes y consiguió que Moscú diera permiso a la agencia reguladora nuclear de la ONU para visitar la central atómica de Zaporiyia en la Ucrania ocupada.
Rusia se refiere a su invasión como una operación militar especial para "desnazificar" Ucrania y culpa a las duras sanciones occidentales de las perturbaciones económicas causadas por el conflicto, como la crisis alimentaria y la inflación de los precios energéticos.
La cumbre en Bali ocurre en medio de reveses militares de Rusia ante la contraofensiva lanzada por Ucrania.
El miércoles, Moscú ordenó la retirada de sus tropas de la ciudad meridional de Jersón, la única capital regional que habían llegado a conquistar desde el inicio de la ofensiva el 24 de febrero.