Figueroa junto a la Presidenta en el encuentro autoconvocado en La Florida.
Agencia Uno
SANTIAGO.- Satisfechos. La palabra que resume el sentir de la CUT, el PC y del presidente de la Cámara de Diputados, Osvado Andrade (PS), quienes destacaron hoy la tramitación del veto de la Presidenta Michelle Bachelet a cuatro aspectos del proyecto de ley de reforma laboral.
La decisión adoptada ayer en un comité político extraordinario en La Moneda, enviada el 7 de mayo pasado, enfrenta los efectos del fallo del Tribunal Constitucional (TC) que declaró ilegal la titularidad sindical y la extensión de beneficios vía afiliación.
La presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, dijo que "es un avance sustantivo para mejorar la relaciones laborales y, sobre todo, para que Chile avance en mayor equidad y justicia social".
"Este es un beneficio, o triunfo, para los chilenos y chilenas", añadió tras acompañar a la Presidenta a un encuentro local autoconvocado del proceso constituyente en la Escuela Básica "Maestra Elsa Santibañez" de La Florida.
A su turno el presidente del PC, Guillermo Teillier, reiteró su rechazo al fallo del TC, aunque manifestó que "estamos conformes con lo que la Presidenta ha determinado".
"La ley, a pesar de que el Tribunal Constitucional rechazó la titularidad sindical, significa un avance. Por lo menos van a tener derecho a huelga sin reemplazo y tendrán un piso para negociar", completó.
Mientras que Andrade aseguró que "para un abogado, que es mi caso, que tuvo en muchas veces negociaciones colectivas, contar con pisos, buenas perspectivas, con huelga sin reemplazo y con extensión de beneficios de mutuo acuerdo, un tremendo logro".
"Créame que para quienes tenemos experiencia práctica en materia de negociación colectiva, van a cambar las cosas, se lo puedo garantizar", completó.
El veto presidencial busca eliminar los pactos de adaptabilidad en materia de jornadas, de horas extraordinarias y de jornadas pasivas, además de los quórum para negociar.