El diputado Ignacio Urrutia hoy protagonizó una nueva polémica.
Aton
SANTIAGO.- La comisión de Ética de la Cámara decidió sancionar al diputado
UDI, Ignacio Urrutia, con el máximo castigo que establece el reglamento interno por sus dichos en contra de las víctimas de violaciones a los Derechos Humanos.
El pasado
19 de abril, cuando en una sesión de la Sala se informó que el Gobierno había decidido retirar un proyecto que entregaba un bono compensatorio a los sobrevivientes de esos hechos ocurridos en dictadura, el parlamentario gremialista tomó la palabra y celebró la determinación del Ejecutivo junto con asegurar que ellos son
"terroristas con aguinaldo".
Esto generó el inmediato rechazo de los parlamentarios de oposición, quienes incluso se retiraron del Hemiciclo, y la diputada
Pamela Jiles (PH) fue a increparlo directamente a su asiento protagonizando un forcejeo con él y otros legisladores.
Según confirmó el presidente de la comisión de Ética a
Emol, diputado
Bernardo Berger (RN), la instancia analizó todos los antecedentes y "ha resuelto
aplicar la máxima sanción de acuerdo al reglamento interno que existe en la Cámara y en forma unánime se decidió aplicar la sanción de censura y también en forma anexa de un 7% de su dieta bruta mensual".
De esta manera y considerando que la renta bruta de los diputados supera los
$9.100.000 mensuales, Urrutia deberá pagar a la Cámara el próximo mes cerca de
$637.000.
Además el ser censurado, significa que
esta sanción quedará para siempre en su hoja de vida parlamentaria.
La noticia se da a conocer justo cuando hoy el
diputado Urrutia volvió a ser protagonista de otra polémica luego de que gritara "¡ni cagando!" en medio de la sesión de la Sala de la Cámara de esta mañana en que se pidió que la Corporación pidiera disculpas al abogado
Jaime Bassa, quien fue cuestionado por haber vestido solo camisa y no corbata y chaqueta al asistir a una comisión.
El
diputado Berger informó además que Jiles también podría ser sancionada por este episodio, ya que también fue llevada hasta la comisión de Ética para analizar su comportamiento. Su situación podría conocerse los primeros días de agosto, al regreso de la semana distrital.