La senadora Jacqueline van Rysselberghe, fue reelecta como presidenta de la UDI.
AGENCIA UNO
SANTIAGO.- La senadora Jacqueline van Rysselberghe, fue reelecta este domingo como presidenta de la UDI, imponiéndose así en las urnas el jefe de bancada gremialista, Javier Macaya, durante las elecciones internas del partido.
La actual timonel seguirá a la cabeza de la colectividad por los próximos dos años, dejando en el camino a su contendor Macaya, quien reconoció la derrota.
En el proceso, se regresó al tradicional mecanismo de "lápiz y papel", tras la suspensión de los comicios del pasado 2 de diciembre debido a fallas en el mecanismo de sufragio electrónico presencial a cargo de la empresa E-Voting.
Luego de votar en Concepción cerca de las 11:30 horas de la mañana, Van Rysselberghe se trasladó a Santiago junto al alcalde de Los Álamos, Jorge Fuentes, quien será el nuevo secretario general del partido. Para luego instalarse en la sede de la UDI, ubicada en Avenida Suecia, donde esperó los resultados de los comicios.
El camino al triunfo
Durante la campaña, la senadora marcó claras diferencias con el diputado e incluso impuso una agenda propia que no dejó indiferente al mundo político. Entre los temas que marcaron la competencia, estuvo el viaje que efectuó a Brasil para juntarse con el en ese entonces candidato presidencial Jair Bolsonaro, hecho que fue criticado por quienes apoyaban al diputado.
Esta misma semana, Van Rysselberghe estuvo concentrada en la visita a Chile del diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del Mandatario electo de Brasil, con quien este jueves y viernes sostuvo varias actividades, entre ellas reuniones con personeros del Gobierno y dirigentes de Chile Vamos.
Tras las fallidas elecciones a inicios de diciembre, la senadora además estuvo activa presentando una denuncia en la Fiscalía Oriente para que se investigara un eventual ciberataque en la elección.
Asimismo, en medio de las denuncias de militantes "suspendidos" que quedaron fuera del padrón de adherentes considerado en la elección, ésta le propuso a Macaya que juntos pidieran al Tribunal Supremo del partido que permitiera que dichos militantes pudieran votar, idea que el diputado rechazó y calificó como "una medida desesperada".
Respecto a los desafíos que asumirá la nueva directiva, la legisladora señaló a Emol el pasado 23 de noviembre que en lo político está, el "consolidar a la UDI como la principal fuerza política del país, reforzar la unidad interna y abrir el partido hacia los militantes para que tengan una participación efectiva en la toma de decisiones y en las definiciones que se adoptan".
Mientras que en lo electoral, indicó que "tenemos desafíos clave como la elección municipal y de gobernadores en 2020, y la presidencial y parlamentaria de 2021". Un punto importante de su candidatura fue dar mayor inclusión del mundo regional y municipal y la cual se vio reflejada en los nombres que integraron su lista a la directiva gremialista.