SANTIAGO.- Cinco días se estima que duren las masivas reformalizaciones que llevará a cabo en el Centro de Justicia de Santiago el
fiscal regional de Magallanes, Eugenio Campos, en el marco del millonario fraude de Carabineros que ya supera los
$28 mil millones.
A dos años de estallado el caso, el Ministerio Público llevó ante el 7° Juzgado de Garantía a 33 indagados por los delitos de malversación de caudales públicos, asociación ilícita, lavado de activos, falsificación e instrumento público falsificado.
Entre estos se encuentran los generales en retiro, Flavio Echeverría, quien estuvo al mando del Departamento de Finanzas entre 2012 al 2016; e Iván Whipple, quien ocupó el mismo cargo entre 2006 a 2011.
De acuerdo al ente persecutor, las defraudaciones se habrían prolongado por al menos 11 años, implicando una defraudación que a la fecha alcanza casi $28.400.00.000.
Así, Campos aseguró al tribunal que los imputados se aprovecharon de la falta de controles internos y utilizaron sus cargos y acceso a cuentas institucionales para desviar los fondos fiscales.
"La asociación podía usar a su conveniencia las distintas cuentas corrientes institucionales, traspasando fondos desde unas y otras y ocultando los dineros que habían sido retirados aparentando que dichos montos correspondían a remuneraciones, viáticos y desahucios y otros falsos motivos", sostuvo.
Añadió que algunos de los indagados cumplían el rol de receptores, debiendo "fraccionar y distribuir el dinero entre los miembros de la organización mediante la emisión y entrega de cheques en blanco, transferencias bancarias, depósitos, vale vista o retirando el dinero de las cuentas para luego entregarlo en efectivo".
Se comprobó, además, la realización de inversiones con las ganancias.