SANTIAGO.- El presidente de la DC, Fuad Chahín, manifestó su rechazo hacia las presiones ejercidas desde el Frente Amplio (FA) para la nominación del reemplazante de Gabriel Silber como candidato a la presidencia de la Cámara de Diputados, luego de bajar su candidatura ante la aparición de denuncias anónimas en su contra por violencia intrafamiliar.
En entrevista con Radio Universo, el líder demócrata cristiano señaló que "lo que nos corresponde como partido y bancada es poder proponer un nombre que concite la mayor unidad posible, que nos permita salir fortalecidos en un momento absolutamente duro y difícil, porque Gabriel es una persona muy querida y apreciada dentro de la bancada".
"El acuerdo era innominado, cada partido tiene el derecho a elegir quién es el candidato que presenta cada una de las instancias que le corresponde de acuerdo a este acuerdo administrativo. Por lo tanto, para nosotros
no es aceptable que se pretenda vetar o influir respecto de la decisión que va a tomar autónomamente la DC", enfatizó.
En ese contexto, Chahín recordó que "nuestros diputados cumplieron cabalmente el acuerdo, jamás le dijeron al PS quién tenía que ser su candidata (…) jamás le hemos planteado a los demás partidos quiénes deberían ser sus candidatos para presidir las comisiones, porque eso está dentro del ámbito de la autonomía de los partidos".
"Nosotros vamos a exigir lo mismo para la DC y esperamos que los demás parlamentarios se dejen de buscar excusas y cumplan sus acuerdos y sus compromisos, respetando la palabra", recalcó.
Consultado sobre cuál cree que fue el origen de los correos que pusieron fin a la postulación de Silber, indicó que "no voy a andar ventilando las sospechas, por cierto uno puede presumirlo. Sería muy irresponsable si yo públicamente doy a conocer algunas de esas sospechas, pero claramente aquí hay una intencionalidad política".
"Creo que sería muy irresponsable sin tener un antecedente serio, más allá de la subjetividad y los análisis que pueda hacer el empezar a levantar sospecha. Lo que si me parece es que esto es un hecho gravísimo y lo que tiene que ocurrir es que se investigue, que se sepa cuál es el origen y que se aclare absolutamente esta situación", declaró.
Conversación sobre quiebre
Asimismo, el dirigente reconoció este miércoles que la semana pasada conversó con Cristina Orellana, esposa del diputado Gabriel Silber, para abordar los rumores que ya en ese momento circulaban sobre un eventual problema de violencia intrafamiliar en su matrimonio, los cuales aseguró fueron absolutamente desmentidos.
Al respecto, el ex diputado señaló que "soy muy amigo de Gabriel y de su señora y sé que han pasado momentos muy difíciles y duros con todo esto. Lo que yo puedo señalar es que yo no tengo ningún antecedente formal ni informal, ninguna denuncia. Lo he conversado tanto con Gabriel como con la propia Cristina por separado".
"Ayer fue la propia Cristina quien acompañó a Gabriel a hacer la denuncia en la PDI y por lo tanto es absolutamente inverosímil lo que contiene ese correo (…) con Cristina he conversado y de hecho, hace exactamente una semana, el martes de la semana pasada,
estuve cenando con ella en su casa", añadió.
En esa línea, relató que "estuvimos conversando de política y también de este tema, porque claramente ellos como cualquier familia han pasado momentos difíciles como matrimonio".
Consultado sobre si hablaron específicamente sobre violencia, el dirigente respondió que "de la situación matrimonial, porque había periodistas que empezaban a consultar respecto a estos antecedentes y yo le pregunté efectivamente y ella me contó cuestiones que no tengo por qué hablar públicamente, pero que tienen que ver con la situación que ellos vivían".
"Por eso digo responsablemente que después de haber conversado con Gabriel y con Cristina no he recibido ninguna denuncia ni ningún antecedente que dé cuenta de que pueda tener algún atisbo de verosimilitud esta denuncia anónima", concluyó.
