General Enrique Bassaletti, jefe de la Zona Metropolitana Este de Carabineros.
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"Nuestra sociedad está enferma de una enfermedad grave. Supongamos que sea un cáncer (...) El tratamiento del cáncer se hace con quimioterapia en algunos casos y otros con radioterapia. Cuando se busca solucionar ese problema, en el ejercicio del uso de esas herramientas médicas se matan células buenas y células malas, porque es el riesgo que se somete cuando se usan herramientas como las armas de fuego".
Esa fue la polémica declaración que el jefe de la Zona Metropolitana Este de Carabineros, general Enrique Bassaletti, emitió esta mañana para defender el uso de escopetas antidisturbios en contra de manifestantes durante las protestas, generando una ola de críticas en su contra.
Ante este escenario, la autoridad policial realizó un mea culpa esta noche y pidió perdón por lo que, a su juicio, fueron unas declaraciones desafortunadas.
"Quiero aprovechar esta oportunidad para ofrecer sinceramente disculpas porque en el contexto de una pregunta que se me señalaba, en relación con un camarógrafo de un canal de televisión que fue lesionado, yo buscando ejemplificarlo, quizás equivocadamente en mi estilo, traté de buscar ejemplos cotidianos", manifestó Bassaletti, poco después de entregar un balance de los incidentes que se han producido esta jornada.
"Derechamente me equivoqué y di un ejemplo que naturalmente no fue el debido. Y frente a eso no tengo más que excusarme porque el contexto del ejemplo pudo haber herido a más de alguien", agregó el general, junto con asegurar que "jamás se me pasó por la mente tratar de jugar o nada que se le parezca con una enfermedad tan grave como la que yo señalaba ahí (...) De todo corazón, no fue mi intención".
En esa línea, Bassaletti reconoció que "me toca asumir las consecuencias de un equívoco", aunque enfatizó en que "no tuve ninguna otra intención que la de buscar un ejemplo cotidiano, práctico, (pero) totalmente equivocado. Me excuso de corazón".
Las disculpas del uniformado llegan después de la serie de cuestionamientos que recibió por sus dichos, los que incluso contaron con el rechazo del ministro del Interior, Gonzalo Blumel, quien calificó sus palabras como "una frase no afortunada".