Luego de casi cuatro horas de reunión, los representantes de los partidos políticos de la oposición junto a los dirigentes del frente sindical de la Mesa de Unidad Social llegaron a un acuerdo para trabajar juntos con miras al plebiscito constitucional de abril de 2020 y actuar coordinadamente en temas como DD.HH. y las demandas levantadas durante la crisis social.
A la cita, que fue convocada por los miembros del bloque de trabajadores de la organización, concurrieron la totalidad de los partidos de centroizquierda, desde la DC hasta el Frente Amplio e incluyendo al PC y al PH, colectividades que se restaron de apoyar la reforma que habilitó el proceso constituyente en el Congreso Nacional.
Tras el encuentro, el
presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, comentó que "fue una reunión franca por lado y lado, nosotros teníamos el mandato de nuestras bases de hacer nuestras críticas. Creemos que en muchos sentidos, y se lo dijimos, la oposición no ha jugado el rol que debe jugar".
"Pero esa reunión franca fue buena, porque nos permitió ir aclarando posiciones y confluyendo en algunos acuerdos. Por de pronto en el tema de DD.HH., (…) particularmente coincidimos todos en solicitar la renuncia del general director de Carabineros, Mario Rozas, cosa que vamos a hacer formalmente lo más pronto posible", indicó.
En cuanto a la agenda social, Aguilar sostuvo que "todos coincidimos en que es indispensable impulsar una agenda robusta que implique dejar atrás el modelo neoliberal, en particular en pensiones, porque es un tema que está en el Congreso, donde se debe rechazar la propuesta del Gobierno e impulsar una reforma profunda al sistema previsional".
"Concordamos en que el plebiscito de abril es muy importante, que va a ser determinante en el futuro político del país y que por lo tanto es necesario participar".
Mario Aguilar, presidente del Colegio de Profesores
"En materia constitucional, concordamos en que el plebiscito de abril es muy importante, que va a ser determinante en el futuro político del país y que por lo tanto es necesario participar de ese plebiscito. Nosotros lo estábamos conversando en Unidad Social, pero ese proceso debe tener garantías democráticas sustantivas que aún no están aseguradas", dijo.
En referencia a esas garantías, relativas a la inclusión de paridad de género, indígenas e independientes, el dirigente aseguró que "todos estuvimos de acuerdo en interpelar al Senado para que esas condiciones mínimas se aprueben y los trece partidos y el bloque sindical estuvimos de acuerdo en eso".
"Quedamos de seguir dialogando sin que las partes depongan sus críticas y diferencias, porque creemos que los partidos de oposición tienen que jugar un rol más intenso y decidido para detener la agenda del Gobierno y avanzar más en la que está pidiendo la ciudadanía", concluyó.
Recriminaciones por acuerdo constitucional
En tanto, el secretario general del PPD, Sebastián Vergara (PPD), reconoció que fue “una reunión bastante dura, en algunos minutos los partidos nos hemos sentido pisoteados, que nos han faltado el respeto, pero pese a eso nos hemos quedado porque creemos que la unidad lo vale todo, es un momento en que nos necesitamos todos y todas".
"No es momento de sacar pequeñas rencillas o dividendos políticos, necesitamos una unidad para sacar una nueva Constitución nacida en democracia", afirmó, en referencia a las críticas realizadas por los dirigentes sindicales a los partidos que suscribieron el acuerdo por la nueva Constitución por negociar de espaldas a los movimientos sociales.
Al respecto, Vergara comentó que "tiene que ver principalmente con eso, pero nosotros les hemos hecho ver que se cambiará la Constitución no solo para los partidos que firmaron, sino que para todos los chilenos. Ahora, me quedo tranquilo
porque señalaron que van a participar en el plebiscito".
En tanto, el secretario general de Comunes, Jorge Ramírez, detalló a Emol que en la reunión "se manifestaron las diferencias que hubo en materia constitucional, pero todos manifestaron su voluntad de seguir trabajando juntos. Se logró un acuerdo de seguir trabajando juntos y generar una articulación de trabajo".
En cuanto a las diferencias, Ramírez aseveró que estas "son conocidas, hay partidos que han manifestado la importancia de pelear para que la convención se llame asamblea constituyente y otros que hemos manifestado que esa pelea no tiene sentido y hay que concentrarse en generar la convocatoria para votar que sí".
"Unidad Social mantuvo sus críticas a como se llegó al acuerdo. Fue muy duro, fueron claros en manifestar su molestia. Hubo partidos a los que se les trató con más dureza de la que se les debería tratar, particularmente los de la transición", indicó.
Finalmente, el dirigente frenteamplista destacó la determinación de rechazar la propuesta del Gobierno en la reforma de pensiones, adelantando que "acordamos que vamos a trabajar para que el 5% vaya a sistema de reparto". Asimismo, expresó que la voluntad de las partes es volver a reunirse durante la primera semana de enero de 2020.