Ingenieras chinas trabajan en vacuna experimental en laboratorio de Beijing.
AFP
Un nuevo avance en la carrera por encontrar la vacuna contra el coronavirus se ha registrado en el mundo, esta vez,
en China, desde donde informaron resultados auspiciosos en las investigaciones para dar con una fórmula que genere anticuerpos en las personas.
Respecto a este avance, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, detalló que el acercamiento entre Chile y China existe "
a través de una institución universitaria muy prestigiada en Chile que está en contacto con la agencia de vacunas en China".
Asimismo, destacó que independiente de lugar desde donde emane la vacuna, "nuestro Presidente ha hecho esfuerzos por conectarse directamente con presidentes, con primeros ministros, para lograr que Chile esté en la lista de los primeros países que reciban esta vacuna, cualquiera sea su origen, una vez que se haya producido".
Esto, porque "es evidente que la competencia por la vacuna, que vamos a tener en unos meses o en un año más, va a ser una competencia muy dura, como lo fue en el pasado reciente, la guerra por los respiradores".
Producir una vacuna industrialmente "puede tomar muchos años"
El secretario de Estado explicó que esta vacuna se encuentra en la fase 2 de las 4 que se necesitan para probarla. "Fase 2 quiere decir que se está inyectando la vacuna fabricada, y evaluando si produce una cantidad suficiente de anticuerpos, como si se tratara de una infección verdadera, en voluntarios sanos".
Luego de eso, se mide los días posteriores, si desarrollan o no defensas de esta pseudoinfección que les produce la vacuna. Además, se monitorea que junto con los anticuerpos, los efectos adversos que podría originar. "Esta pregunta, la vacuna en China está más adelantada en poder responder y poder certificar esta fase 2, donde produce anticuerpos y el daño que produce es mínimo, o no existe".
Pese a ello, Mañalich llamó a ser responsables en este aspecto, debido a la cantidad de procesos adicionales que se requieren, en caso que exista la vacuna correcta. "Independiente de la tecnología moderna para producir vacunas, estamos hablando de varios meses para lograr producir un producto que se diga 'este producto realmente sirve', y lo vamos a producir industrialmente".
Además, advirtió que hay un tema de tiempos involucrados. "La producción industrial de una vacuna, para los 7.500 millones de habitantes del planeta, es una fase muy complicada, que puede tomar muchos años".