"Queremos ponernos en la situación más compleja y eso significa aumentar en más de mil camas el número que tuvimos en la peor época de la pandemia", aseguró este lunes el ministro de Salud, Enrique Paris, al transmitir su preocupación por lo que podría significar, según prevén las autoridades sanitarias, una segunda ola de la pandemia a partir de enero.
Durante la conferencia habitual del Minsal, Paris declaró que su preocupación era compartida por el Presidente Sebastián Piñera, quien pidió que se elaborara un plan de emergencia ante la posibilidad de que ocurra este fenómeno que en decenas de países azotó a la población con más fuerza que la primera ola.
Sin detallar cifras, el ministro explicó que se fijaron tres estrategias para distintos escenarios posibles, que se inspiran a su vez en lo que ha pasado en otras latitudes. El peor escenario replica la realidad estadounidense, el moderado sigue las tendencias europeas y el más conservador considera que pueda existir cierta estabilidad en los contagios.
Este martes, el ministro entregó números referenciales: el escenario que anhelan en el Minsal es no superar 3.026 nuevos casos diarios, lo que implicaría el uso de 2.453 camas UCI, según explicó a El Mercurio. La proyección basada en el comportamiento del virus en Europa escala los nuevos diagnósticos a 6.608 casos diarios, lo que traería consigo la exigencia de 3.558 camas críticas.
La proyección matemática "catastrófica", en tanto, imita la subida "gigantesca" de casos en Norteamérica y "simula que podríamos llegar a tener 9.560 casos al día, por lo que vamos a necesitar 4.562 camas", aseguró el ministro Paris. El escenario implica que se registrarían 2.600 casos diarios más que en peor momento de la pandemia hasta el momento, que corresponde al peak del 14 de junio, cuando se registraron casi 7 mil casos.
Instalar una "percepción de riesgo"
El escenario significa, también, una exigencia de camas críticas sin precedentes. "Nosotros teníamos 900 camas en enero. Eso significa que tenemos personal entrenado —de primer nivel, Fórmula 1— para 900 camas", explicó en Radio Universo el ex presidente de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, Tomás Regueira. Según explicó, hoy hay 1.800 camas críticas en uso, de un nuevo universo de 2.200, lo que representa un aumento del 230% de la capacidad.
"Hoy tenemos el doble de pacientes de las camas que teníamos en enero, por lo tanto ya no estamos trabajando como Fórmula 1. Ya estamos trabajando de una forma ampliada y de menor calidad. En el peak de la pandemia tuvimos 3.200 camas. Si tenemos que llegar a 4 mil es algo muy malo que se va a asociar a mucha mortalidad por pérdida de la calidad de atención", expuso Regueira.
"Hoy tenemos el doble de pacientes de las camas que teníamos en enero, por lo tanto ya estamos trabajando de una forma ampliada y de menor calidad. En el peak de la pandemia tuvimos 3.200 camas. Si tenemos que llegar a 4 mil es algo muy malo que se va a asociar a mucha mortalidad por pérdida de la calidad de atención"
Tomás Regueira
Por eso el médico aseguró que comparte el mensaje del ministro, en el sentido de "querer instalar una percepción de riesgo y que la gente no piense que zafamos". "Comparto que el Ministerio se ponga en el peor escenario posible, porque uno de cada tres pacientes UCI siguen siendo covid-19. No llueve, pero gotea, y va a haber que echar mano a personal no capacitado, por lo que los pacientes no van a tener la calidad de atención que se merecen y por lo tanto vamos a tener mortalidad asociada a personas que queremos, y es terrible decirlo", añadió.
Es otra de las preocupaciones que surgen ante ese escenario: el estado del personal médico, que ya ha enfrentado los embates del virus a lo largo de nueve meses. "El personal está agotado", explicó Paris el lunes. Para enfrentar una subida de tal magnitud, se baraja "pedir la colaboración de las universidades y de los becados que están en formación", como se ha hecho en otros países, donde estudiantes avanzados de Kinesiología, Medicina, Enfermería, Tecnología Médica y Terapia Ocupacional se han unido a los equipos covid-19.
A pesar de que Regueira considera que tener un plan hospitalario de segunda ola "está bien y contribuye a generar percepción de riesgo", también cree que "el Gobierno tiene que insistir en ir mejorando con más energía la trazabilidad y el testeo".
En ese sentido, el Colegio Médico también expresó su preocupación por el foco del mensaje. "Por las palabras del ministro de Salud, queda la apreciación de que nuevamente estamos poniendo los énfasis en las camas críticas y no en contener la pandemia, cortar la cadena de transmisión y evitar la cantidad de contagiados", dijo la presidenta del Colmed, Izkia Siches, a radio ADN. La Mesa Social, aseguró la médica, todavía no conoce el plan, el que pedirán que se dé a conocer y se "clarifique".