SANTIAGO.- Como era de esperarse, el anuncio del Gobierno de permitir la apertura de establecimientos educacionales a partir de la fase 1 (cuarentena) del plan Paso a paso generó opiniones divididas entre distintos actores de la educación.
Desde el movimiento de apoderados "Escuelas abiertas" –que ha promovido la reapertura de los establecimientos durante la pandemia– califican la medida como "un primer avance", pero cuestionan que no haya acciones específicas para promover que los establecimientos que aún no abren efectivamente lo hagan.
"Se agradece que se permita la continuidad del aprendizaje en escuelas que ya han abierto, pero nos preocupa enormemente el millón y medio de niños cuyos establecimientos no han abierto hasta ahora", comenta Valentina Rebolledo, una de las voceras del movimiento.
Sostiene que "el foco debe ponerse en lograr que los sostenedores que, pudiendo hacerlo, no han abierto sus colegios hace más de 18 meses". "Creemos que la decisión de apertura no puede ser voluntaria para el establecimiento. Los sostenedores deben abrir las escuelas; está en juego el derecho a la educación de los niños", subraya.
Con todo, afirma que "se acabaron las excusas" y que insistirán en "empoderar a los padres, madres y apoderados para que reclamen por el derecho de sus hijos a la educación y exijan a los sostenedores la apertura".
En tanto, la encargada de proyectos de Acción Educar, Pía Turner, señala que "ésta es una noticia muy positiva". "Que los establecimientos puedan abrir en cuarentena le quitará la inestabilidad que los cambios de fase del Paso a paso les imponían a las comunidades educacionales que ya estaban encontrándose presencialmente, poniendo a la educación como una prioridad", resalta.
Agrega que "nuestros estudiantes han sufrido tremendamente con esta pandemia, lo que se ha notado en su salud mental, aprendizaje, nutrición, etc.; es de esperar que cada vez sean más las autoridades locales que avancen en priorizarlos en las medidas que toman".
Colegio de Profesores critica ausencia de otras medidas
Por su parte, el presidente del Colegio de Profesores, Carlos Díaz, reforzó sus críticas hacia la decisión del Gobierno y afirmó que "es absolutamente apresurado dar a conocer hoy día la posibilidad de abrir los establecimientos, incluido en fase 1, sin que sepamos cuáles van a ser exactamente los efectos de la variante Delta en nuestro país".
"Denunciamos como criminal estos anuncios de pretender abrir en fase 1 o fase 2 los colegios y generar condiciones de muchos contagios y posibles muertes en nuestros estudiantes", sostuvo el dirigente.
Díaz cuestionó que en los anuncios del Ejecutivo "nada se dice" respecto de "cómo se van a cumplir los protocolos que están escritos".
"No hay apoyo a la labor que hoy día están realizando los docentes en las escuelas y liceos, no hay apoyo para nuestros estudiantes en la conectividad que tanto hemos reclamado, no hay lineamientos ni propuestas pedagógicas, es más de lo mismo. Aquí la única preocupación que plantea el ministerio una vez más es solo abrir los establecimientos, sin importar si los niños asisten o no", cuestionó.